El Jelaly, la primera saga de yihadistas de España
M. S. P. | Madrid
Cuatro hermanos marroquíes residentes en España desde 2000 y los cuatro miembros activos del Estado Islámico. Los servicios antiterroristas de la Guardia Civil ayer detuvieron al último de la saga tangerina de El Jelaly que quedaba en libertad, Mohamed, de 43 años. En julio del pasado año, los agentes del instituto armado habían capturado a dos de sus hermanos menores, Abdelhak y Omar, de 33 y 22 años.
Los tres se dedicaban a la financiación de las redes del Daesh y al envío de dinero, siempre en pequeñas cantidades, al autodenominado ‘Califato’ para que los terroristas siguieran sufragando los viajes de nuevos muyahidines a la «tierra prometida». El trabajo de los tres detenidos -apuntan fuentes de la lucha antiterrorista- era una suerte de homenaje a Bachir, el cuarto de los hermanos que falleció combatiendo en Palmira, Siria, en algún momento de finales de 2015. Bachir, un exconductor de autobuses y exempleado de gasolinera, emigró al califato en febrero de 2015 con su mujer y sus dos hijos menores tras vender que la carnicería halal que el clan había regentado en la localidad de Arbúcies (también en Gerona) durante años. Su muerte le había convertido a ojos de sus hermanos en un ‘mártir’, cuya memoria se dedicaban a honrar financiando a sus compañeros de armas en el ‘Califato’.