La hija de Pujol duplicó su fortuna «gracias a un gestor»
M. Balín | Madrid
Mireia Pujol, hija del expresidente de la Generalitat de Cataluña Jordi Pujol, aseguró ayer al juez de la Audiencia Nacional que investiga el origen de la fortuna familiar, José de la Mata, que gracias al gestor de su cuenta bancaria en Andorra logró multiplicar sus beneficios hasta un máximo de 1,7 millones de euros.
A diferencia de la versión de sus hermanos, la investigada por un delito de blanqueo de capitales atribuyó a este presunto gestor el incremento de su patrimonio y no al hermano mayor de la familia Pujol Ferrusola, Jordi, quien según aquéllos fue el responsable de mover el dinero repartido de la herencia del abuelo Florenci, fallecido en 1980, y conseguir un rendimiento satisfactorio. «Felicidades a su gestor», le llegó a espetar de forma irónica el juez De la Mata a Mireia, según fuentes jurídicas presentes en el interrogatorio. Ésta fue la última de los siete hermanos en declarar. La que fuera bailarina y ahora fisioterapeuta explicó que su parte de la herencia fueron 62 millones de pesetas (372.000 euros) que ingresó en 1992 en la entidad Banca Reig y que en 2010, cuando trasladó su cuenta a la entidad andorrana BPA, ascendía a 1,7 millones.