Cerrar

El debate de los Presupuestos sitúa a Rajoy ante su primer test de estrés

El Gobierno ultima un acuerdo con el PNV y llama a sus diputados a no faltar a la votación.

El presidente del Gobierno se somete el jueves a su particular prueba de fuego. JULIEN WARNAND

Publicado por
León

Creado:

Actualizado:

nuria vega | madrid

«Inexcusable asistencia». El Gobierno y la dirección del Grupo Parlamentario Popular se han movilizado «con todo tipo de alertas» para que ni uno solo de sus 134 diputados se ausente esta semana del primer examen de los Presupuestos Generales del Estado en el Congreso. La advertencia llegará antes del 4 de mayo a mediodía a todos los representantes del PP y ministros con acta en la Cámara baja vía mensaje o llamada para facilitar que el Ejecutivo de Mariano Rajoy supere en la votación del jueves su particular prueba de resistencia.

La operación Lezo, las sospechas de corrupción que pesan sobre exdirigentes populares, y el amago de moción de censura de Podemos han contribuido en los últimos días a generar el caldo de cultivo para que el debate de totalidad de la Cuentas públicas se perciba en el PP como un test de estrés que los conservadores esperan solventar con el apoyo de Ciudadanos, Coalición Canaria, UPN, Foro Asturias y el PNV.

Las conversaciones con la formación vasca se han intensificado desde que el jefe del Ejecutivo intervino en la negociación el pasado jueves, recién aterrizado de su visita oficial a Brasil y Uruguay. Los contactos telefónicos entre Rajoy y el líder de los nacionalistas, Andoni Ortuzar, propiciaron que el PNV se abstuviera el viernes de registrar su propia enmienda a la totalidad de los Presupuestos a punto de cerrarse el plazo para su presentación. Un gesto, si no decisivo, sí alentador para el Gobierno, que ultima ahora el acuerdo final que le asegure el respaldo de los cincos diputados encabezados por Aitor Esteban.

«Seguimos negociando», confirmaron ayer fuentes del PNV. También desde el Ejecutivo de Iñigo Urkullu, centrado en la revisión del Cupo -la cantidad que el País Vasco paga al Estado por las competencias no transferidas-, apuntaron que todavía ayer quedaban «flecos» por examinar, pese a que se estén «acercando posturas». Los nacionalistas apuran los tiempos conscientes de la posición de fortaleza que les ha otorgado la inestabilidad del Gobierno del PP, especialmente tras los presuntos escándalos de corrupción destapados. Y confían en que esa ventaja les permita alcanzar un pacto suficientemente beneficioso para su territorio como para poder compensar ante su electorado un acuerdo con Rajoy.

Cargando contenidos...