Los beneficios obtenidos por los vascos y canarios

El 3 de mayo, poco después de que Mariano Rajoy firmara con Andoni Ortuzar el pacto que permitiría aprobar los Presupuestos Generales del Estado, un alto cargo del Gobierno aún se admiraba de la destreza de los nacionalistas vascos en el arte de la negociación. El respaldo de los cinco diputados del PNV a las cuentas de 2017 resultaba ya entonces, por complejo, difícil de cuantificar. Pero el resultado sirvió para que formaciones como Nueva Canarias entendieran la «circunstancia excepcional» de un Ejecutivo tan en minoría que llegaría a pagar una factura de alrededor de 10.000 millones de euros a cambio de apoyos parlamentarios.

En realidad, las 36 enmiendas del PNV incluidas en el texto rondan los ocho millones. En todo caso, el acuerdo con los nacionalistas va más allá del proyecto de Presupuestos.

Con la misma discreción, Coalición Canaria consiguió que el Gobierno desvinculara el Régimen Económico y Fiscal del archipiélago del sistema de financiación autonómica. El Gobierno, sin embargo, se reservó otras cesiones para la negociación con el representante de Nueva Canarias, Pedro Quevedo, que este fin de semana dio por cerrado el pacto que reporta 204 millones.