Crisis interna entre los dos socios de Junts pel Sí
La crisis interna sobrevuela desde el primer día en las relaciones entre los dos socios de Junts pel Sí, pero se desató con toda su crudeza a raíz del anuncio de que el concurso para la compra de urnas para la consulta había acabado en fiasco. Desde el PDeCAT se sienten atacados (sobre Puigdemont ningún sector del independentismo tiene la menor duda) y hoy se defendieron con el argumento de que nadie puede darles lecciones, ya que tienen inhabilitados y una consejera querellada.
Las encuestas
Los recelos entre unos y otros no son más que una prueba de que pase lo que pase con el 1-O, el proceso acabará en unas elecciones que Puigdemot tratará de que sean lo más tarde posible, pues el PDeCAT está en una situación delicada en las encuestas. Además, ponen de relieve las dudas que hay en el soberanismo sobre sus propias fuerzas. En las elecciones del 27 de septiembre de 2014 Junts pel Sí y la CUP obtuvieron el 47% de los votos, un respaldo que ahora no está asegurado. El tercero en discordia, la CUP, que ha perdido influencia desde que avaló los presupuestos, advirtió recientemente de que no está dispuesta a asumir sucedáneos y que «reventará» la legislatura si el referéndum no se celebra por «deserciones internas». El aviso se produjo la semana pasada, pero ya anticipaba que hay consejeros que no tienen la «firmeza y la determinación» que piden los anticapitalistas. La CUP reclamó hoy la dimisión de Baiget, quien replicó que su cargo está a disposición del presidente de la Generalitat.