Urkullu constata que la cita catalana no tiene garantías

El lendakari, Iñigo Urkullu, quiso ayer mostrarse realista y advirtió de las dificultades para que el referéndum independentista de Cataluña llegue a buen puerto. Pese a que el jefe del Gobierno Vasco criticó las «respuestas judiciales» del Gobierno del PP a un «problema político», Urkullu tampoco quiso llevar a engaño a la ciudadanía y llamó a asumir que la consulta del 1 de octubre «no tiene las garantías debidas», una vez que el Estado ha desplegado toda su artilleria judicial. Unas reflexiones que le valieron duras criticas de EH Bildu y hasta de la propia ERC. Ante esta complicada coyuntura, el jefe del Gobierno Vasco insistió en su la vía del diálogo y la reconstrucción de puentes, pese a ser consciente de que, probablemente, predica en el desierto. Urkullu repasó la última hora del proceso catalán en una entrevista en Onda Vasca en la que sorprendió por la sinceridad con la que habló del referéndum, en un momento, ademas en el que su partido, el PNV ha apretado el discurso para defender a los soberanistas catalanes pese a apostar en Euskadi por otra vía diferente al rupturismo. El lendakari, sin embargo, cree que «hay que ser honestos» y «saber que, se celebre lo que se celebre el 1 de octubre, no tiene las garantías debidas» de lo que «en principio sería una aspiración» del pueblo catalán.