Tres décimos del segundo y un quinto alegran el día en Villablino
SUERTE EN LA CUENCA. No fue mucha la suerte que cayó ayer en Laciana pero al menos el sorteo se acordó de la cuenca minera. Los agraciados no se dejaron ver ayer en todo el día, pero la lotera, que estrenaba Navidad en el despacho, no se podía creer que tras el segundo llegara el pellizco del quinto.. Cuatro décimos vendidos en el terminal dejan algo más de 750.000 euros en premios.
Los dos premios se dieron en la misma administración. V. ARAUJO
vanessa araujo | villablino
Los vecinos de Laciana ayer no hablaban más que de la visita de la diosa fortuna a Villablino y es que en la capital lacianiega la suerte dejó un segundo y un quinto premio del Sorteo Extraordinario de la Lotería de Navidad. En ambos casos, los boletos fueron adquiridos en el despacho de lotería de la calle Brañina, 5 de la capital lacianiega. Del segundo premio, el número 51.244, se vendieron tres décimos por terminal, dejando 375.000 euros en total. Del quinto premio, correspondió al número 22.253, y cuyo décimo también fue vendido por terminal, la suerte recompensó con 6.000 euros.
La propietaria de este establecimiento, Charo Antuña, ha empezado con muy buen pie a regentar el negocio, ya que tan sólo lleva mes y medio al frente de este despacho. «Me siento muy nerviosa y muy contenta», afirmaba ayer la afortunada, que reconocía que al ser por terminal es muy difícil conocer en quien pueden haber recaído los premios. La alegría para Charo Antuña con el segundo premio se vio aumentada cuando se enteró de que también había repartido un quinto.
Con este comienzo, Charo Antuña espera que la suerte la acompañe durante los próximos años para «poder seguir dando muchos premios».
No es la primera vez que en este despacho se reparte un premio importante, ya que con su anterior regente, Pablo García, en el sorteo del año pasado también repartió un décimo de un quinto premio.
Ahora los lacianiegos esperan que el sorteo del Niño en enero, vuelva a llevar la suerte a la comarca.