PRESUPUESTOS
Rajoy necesita que el 155 se levante en un mes para atraer al PNV
Los nacionalistas vascos se niegan a apoyar los Presupuestos si sigue la intervención en Cataluña
Justo cuando el Gobierno presentaba su proyecto de Presupuestos para el 2018 en una rueda de prensa en la Moncloa, los nacionalistas vascos quisieron dejar claro una vez más que no los apoyan. El PNV envió un comunicado a la prensa en la que reafirmó su posición de votar en contra de las Cuentas por la situación de "grave excepcionalidad" que vive España debido a la aplicación del 155 en Cataluña. Según los nacionalistas vascos, el Ejecutivo de Mariano Rajoy ha hecho una interpretación "absolutamente extensiva" de ese artículo de la Constitución y ha puesto "en cuestión y en riesgo" el "autogobierno" de los catalanes, algo que también podría "dar lugar al riesgo del autogobierno vasco".
El Gobierno tiene "un mes largo", como dijo el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, para conseguir que el PNV cambie de opinión. Este grupo parlamentario es clave para la aprobación de los Presupuestos, al igual que lo fue el año pasado cuando los votó junto con Ciudadanos, Coalición Canaria, Foro Asturias, UPN, y Nueva Canarias. Rajoy aspira a repetir esa alianza presupuestaria, pero se ha topado con el obstáculo de la situación política catalana. El 155 dejará de ser vigente, según marca el acuerdo del Senado, cuando un nuevo Gobierno catalán al completo (no solo el president, sino también los consellers) asuman sus puestos. De esta manera Rajoy suma una razón más para querer poner punto y final a la intervención de la Generalitat.
Margen para dilatar el calendario
El Ejecutivo registrará los Presupuestos en el Congreso el 3 de abril, a partir de ahí se empezarán a producir las comparecencias de altos cargos para explicarlos y llegará el momento clave para ver si los cinco diputados del PNV tumban o no las cuentas: el pleno en el que se debaten las enmiendas de totalidad. Ese debate se realizará la última semana de ese mes o, como muy tarde, a principios de mayo, según el PP. Hay cierto margen para dilatar el proceso de tramitación mientras se mira de reojo a los independentistas y sus intentos de elegir president.
Rajoy siempre insiste en que los Presupuestos dan "estabilidad" a un país. Si pierde esta nueva batalla que está disputando con los tiempos porque no hay nuevo jefe de la Generalitat, se tienen que repetir las elecciones al Parlament y el PNV mantiene su amenaza, el presidente podría tener entre manos una legislatura fallida. Aunque no sería imposible aguantar en la Moncloa. Fuentes gubernamentales y de Hacienda dejaron caer en febrero que la Constitución no exige aprobar unos Presupuestos cada año y que Rajoy no estaría obligado a adelantar las elecciones generales porque podría prorrogar las cuentas del 2017 varias veces. Aviso a navegantes preventivo, podría decirse.