La solución a la despoblación se llama empleo y buenos servicios»

El declive demográfico, el sobreenvejecimiento (el área rural tiene casi 2,5 mayores por cada joven), el desempleo en los pueblos (con especial incidencia en jóvenes y mujeres), la falta de oferta formativa, la masculinización del campo... Una descripción de los principales problemas que sustentan la despoblación y que el presidente del Consejo Económico y Social, Germán Barrios, puso sobre la mesa de debate. Remarcó que en un territorio como Castilla y León, donde el 90,3% de sus municipios pierden población «todos debemos ponernos al tajo, también es un problema de España y de Europa, debe haber una estrategia en la UE».

El desequilibrio territorial es palpable en Castilla y León: el 80% de la población reside en zonas urbanas, mientras que el 20% restante lo hace en el área rural. Cuenta con 2.248 municipios, una estructura sobredimensionada si se tiene en cuenta que en Portugal, por ejemplo, suman 303, en Galicia 313 o en Andalucía 776. «La fragmentación administrativa es un hecho, faltan estructuras intermedias» y eso a pesar de que subrayó que el 98% de los municipios de la Comunidad pertenecen a alguna mancomunidad.

Apostó por una mejor ordenación del territorio y como espejo habló del paradigma francés, donde en la década de los cuarenta del siglo XX se apostó por la comarcalización de su mundo rural. En las tierras altas de Escocia hace medio siglo comenzaron a poner en valor la vida en el campo..., destacó.

«Hay que dar prestaciones de calidad y oportunidad de empleo. La solución a la despoblación se llama empleo», dijo convencido Germán Barrios. Lamentó que en Castilla y León falten oportunidades laborales y que los servicios sociales sean deficientes. «Nosotros repoblamos Madrid, de los 52.000 castellanos y leoneses que se fueron, 38.000 emigraron a la capital».

Cinco son las líneas de trabajo determinantes para frenar la despoblación, a juicio del presidente del CES, asegurar la financiación de las entidades locales para garantizar la cohesión del territorio y la convergencia interior; buenos servicios sociales públicos; dotar de suelo industrial, inversión y empleo al área rural y canales de distribución e infraestructuras adecuadas. En ese punto, se refirió al Corredor Atlántico y a la necesidad de que haya un bypass que le una con el Mediterráneo por el sur de la Comunidad, de manera que la entrada de las mercancías a Francia se produzca con esta vía no por la zona meridional del país galo.

Como última línea de acción, Barrios aludió a la necesidad de la plena conectividad, ya que ahora sólo el 35% de los municipios tienen total cobertura. Abogó también por la formación de los jóvenes, el relevo generacional, la mayor presencia de la mujer en el campo, la transformación y un tejido empresarial.