Nuevo asalto a la valla con cal viva, ácido y heces
Siete guardias civiles, heridos leves en. la entrada masiva de migrantes en Ceuta.
Un grupo de migrantes muestra su alegría tras conseguir saltar la valla fronteriza. JOSÉ M. RINCÓN
AGENCIAS | CEUTA
Al menos 115 migrantes subsaharianos han entrado ayer por la mañana en Ceuta tras saltar la valla fronteriza en la zona conocida como Finca Berrocal, dejando a siete guardias civiles heridos leves por quemaduras con cal viva que los asaltantes han utilizado para acceder a la ciudad autónoma. En esta nueva entrada, los migrantes han logrado esquivar a la Guardia Civil arrojando a los agentes cal viva, ácido de baterías de automóvil y bolas de heces humanas, usando prácticamente el mismo método que en el salto masivo del pasado 26 de julio cuando lograron acceder a la ciudad 602 migrantes.
Fuentes de la Delegación de Gobierno de Ceuta han informado de que uno de los agentes ha tenido que ser trasladado al Hospital Universitario de la ciudad, aunque su pronóstico es leve. También cinco migrantes han tenido que ser atendidos por Cruz Roja tras el salto.
Al menos 300 personas han intentado saltar la valla que separa Marruecos de Ceuta, aunque finalmente lo han conseguido 115. Los migrantes han aprovechando la relajación de las fuerzas marroquís al coincidir con la hora del rezo colectivo al aire libre, la Musal-la, que marca el inicio de la Fiesta del Sacrificio, festivo local también en Ceuta.
El salto se ha producido justo a la hora de la celebración del rezo colectivo que se celebra con motivo de la Pascua del Sacrificio o Fiesta del Cordero en Ceuta. Tras acceder a Ceuta, los migrantes se han dirigido al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI). Muchos de ellos presentaban profundos cortes en brazos y tórax.
La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) ha reclamado más medios de protección para los agentes que vigilan la valla de Ceuta. En concreto, las demandas de la AUGC pasan por que se permita el uso de medios para el control de masas, como escudos que puedan repeler los productos que los inmigrantes arrojan contra ellos, y material antidisturbios.
El PP ha considerado que este nuevo salto a la valla demuestra que sería «una gran irresponsabilidad» retirar las concertinas situadas en las fronteras terrestres de Ceuta y Melilla.