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Villarejo: «Soy un tipo paciente, sé esperar hasta pegar la hostia»

Publicado por
León

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Cuando los agentes del Grupo III de Asuntos Internos entraron en la casa de José Villarejo en Boadilla del Monte y en su despacho de Torre Picasso se toparon con lo que esperaban: el ‘archivo sonoro’ completo. Casi 30 años de grabaciones a policías, políticos, periodistas, abogados, empresarios, jueces, fiscales, diplomáticos, banqueros, miembros de la realeza. Casi 200 personalidades etiquetadas en archivos mp3 o en viejas cintas de los 90. «Probablemente el archivo más sensible de la historia de España», según relata uno de los agentes. Pero los funcionarios sabían que lo que habían encontrado eran solo «copias de seguridad». Sabían que Villarejo tenía duplicados (o triplicados) de todo aquel material porque siempre se había vanagloriado de ser «intocable» ante la amenaza de hacer públicas sus grabaciones. El excomisario que se jactaba de poder «poner en jaque al Estado» si le acorralaban ya ha comenzado a intentar extorsionar al ‘aparato’ con esas «copias de seguridad». Unos audios que no llegó a sacar cuando amagaron con citarle a la comisión de investigación de la ‘policía patriótica’ pero que ahora ha ventilado para intentar acelerar su salida de la cárcel. Ya todo le da igual. Ha atacado a base de filtraciones a ‘enemigos’ tan peligrosos como el CNI, la Jefatura del Estado y ahora al Gobierno.

Los atestados de Asuntos Internos, a los que ha tenido acceso este periódico, recogen las grabaciones hechas por el excomisario en las que el propio Villarejo, en primera persona, presume de su forma de trabajar basada en la extorsión mediante el «achicharramiento» (uno de los palabros favoritos de Villarejo), o sea grabarlo todo. Bien él mismo (como hizo con Corinna, Ignacio González o Dolores Delgado), bien a través de dispositivos espías. La descripción que hace de su ‘modus operandi’ da una idea de hasta dónde puede llegar Villarejo con Delgado o con cualquier otro que se le ponga por delante. «Yo soy un tipo paciente. He aprendido en mi curro a ser muy paciente. Hay que esperar y esperar hasta que al final le pegas la hostia. Pum, pum, pum. ¿Sabes?», explicaba Villarejo al marido y al cuñado de Ana Rosa Quintana en una reunión.

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