Los ‘Jordis’, el germen de la protesta masiva en las calles
mateo balín | madrid
«El Estado asalta las instituciones propias y llegará hasta donde le dejemos. Vivir en democracia en Cataluña está en nuestras manos». «Atención, todos a Rambla Cataluña con Gran Vía. La democracia se defiende en la calle. Recordad, serena y pacíficamente. Coraje».
Estos mensajes fueron enviados entre las 8.28 y las 8.59 de la mañana del 20 de septiembre de 2017 en la red social Twitter por Jordi Cuixart, presidente de Òmnium Cultural.
Así amanecía aquel último día de verano la cuenta personal del ahora procesado en el Tribunal Supremo por un delito de rebelión, que este martes cumple un año en prisión.
El llamamiento de Cuixart se producía como respuesta a los registros ordenados poco antes por el Juzgado de Instrucción número 13 de Barcelona en varios edificios y sedes de la Generalitat, dentro de la denominada operación Anubis contra los organizadores del referéndum ilegal del 1 de octubre siguiente, que se saldó con 14 detenidos.
De forma paralela, la otra gran entidad civil independentista, Asamblea Nacional Catalana (ANC), nacida en 2012, se sumaba al llamamiento de Òmnium con mensajes desde su cuenta oficial.
Una algarada a la que sumó su voz el otro Jordi del ‘procés’, Jordi Sànchez, entonces presidente de ANC y en prisión preventiva desde hace un año junto a su colega Cuixart.