Vox cultiva votos en plataformas de las fuerzas de seguridad y del Ejército

En los diversos comicios del 2019, Vox llevará listas con visible presencia de exmilitares y exagentes de cuerpos policiales, confirman fuentes no oficiales del partido. Desde antes de las elecciones andaluzas, la formación negocia la colaboración de miembros del Cuerpo Nacional de Policía con sus listas de Córdoba, Gijón, Móstoles (Madrid) y La Línea de la Concepción (Cádiz), según fuentes policiales.

Esas negociaciones serán en parte fruto del proselitismo que la formación de extrema derecha lleva un año realizando en diversas plataformas de funcionarios de las Fuerzas de Seguridad del Estado, un colectivo que ronda el medio millón de profesionales, y que, con sus familias, supone un filón de más de dos millones de votos.

De ese caladero, el policial es el que más atrae al partido de Santiago Abascal, por su protagonismo contra el procés  y su posterior campaña por la equiparación salarial con las policías autonómicas. En rivalidad con Ciudadanos, Vox lleva meses asociándose a las convocatorias de la plataforma radical de policías y guardias Jusapol, que encabeza el policía Natan Espinosa.

Ponerse la camiseta

La asociación, conocida por sus escraches y manifestaciones duras, se deja querer. Dos de sus miembros destacados, el exsindicalista Alfredo Perdiguero y el youtuber Jandro Lion, policías en activo, no ocultan su vinculación con Vox. El segundo alterna en la red charlas sobre asuntos policiales con otras más del gusto del votante de ultraderecha, como la “verdadera” historia del Valle de los Caídos.

Esta vinculación sucede al apoyo logístico en redes sociales que a Jusapol dio en sus comienzos Podemos, y el seguimiento que de sus reivindicaciones, siempre irredentas, ha hecho durante este año Ciudadanos.

Una muestra pudo verse el pasado 5 de mayo en la Puerta del Sol de Madrid. A una concentración de Jusapol acudió el PP representado por Xavier García Albiol, y Ciudadanos por su portavoz de Interior, Miguel Gutiérrez, pero ninguno de ellos consiguió en el estrado el protagonismo de Javier Ortega Smith, secretario general de Vox, vistiendo una camiseta con lemas, en el pecho, de la Operación Copérnico de la Policía el 1-O (“Por España me atrevo”) y en la espalda, un Piolín.

La relación del partido con Jusapol pasa también por detalles biográficos exclusivos. El exdirigente de la plataforma Carlos Morales, que ha participado en actos de Vox, estuvo destinado como policía en la Euskadi en los 90, y trabajó en misiones de contravigilancia tratando de impedir que ETA atentara contra el padre de Santiago Abascal, presidente del partido.

De 60 manifestaciones organizadas por Jusapol, Vox ha mandado dirigentes a todas. A su vez, en el mitin de Vox en Vistalegre del pasado 7 de octubre, Jusapol tuvo abierto un puesto de venta de chapas, banderas y camisetas.

Ejército

Aprovechando el abandono en el que les tienen otros partidos, Vox ha abrazado también la causa de los militares de escala básica que a los 45 años pasan a ser reservistas en paro. Los afectados se han organizado en la plataforma ‘45sindespidos’ para denunciar lo que para Defensa son retiros y para ellos un ERE encubierto que en 2018 ha alcanzado ya a 1.800 soldados.

Durante la campaña de las andaluzas, intermediarios de Podemos prometieron ayuda a la plataforma, pero llegaban tarde.

 

La vicepresidenta segunda de Vox, Mazaly Aguilar, es el nexo con la plataforma, con la colaboración de Víctor Sánchez del Real, el coordinador de la campaña en Andalucía. La primera llegó tarde por edad a alistarse como soldado profesional. El segundo fue candidato de Vox a la alcaldía de Las Rozas (Madrid), y es profesor de comunicación y dueño de una agencia de marketing, Elocuent, en cuya web él mismo se ofrece como "el mejor orador para tu evento o empresa".

Antes de dedicarse a la comunicación, Sánchez del Real hizo la mili en Infantería de Marina. Lo castrense es marca de la casa en un partido con cuadros procedentes de las Fuerzas Armadas y en cuyos actos, al cierre, el público debe ponerse en pie para escuchar el himno nacional.

Dos de los 12 diputados que la formación sentará en el Parlamento de Andalucía han vestido uniforme. El del Ejército del Aire, la almeriense Luz Belinda Rodríguez; el de la Guardia Civil, el jienense Benito Morillo Alejo. Su secretario general, Javier Ortega, pasó cuatro años de juventud en el Grupo de Operaciones Especiales, los boinas verdes del Ejército.

Experto en Defensa

El pasado 26 de mayo, una representación de Vox acudió a Logroño por la celebración en la capital riojana del desfile del Día de las Fuerzas Armadas. Ortega Smith difundió un vídeo de salutación, con un todoterreno URO del Ejército como fondo. Durante la campaña andaluza, el exguardia civil Morillo ha colocado como carátula de sus vídeos de propaganda los escudos de la Benemérita, el Ejército, la Policía, los antidisturbios de ese cuerpo y otras policías, incluidos los Mossos d’Esquadra.

Pero para dirigirse al mando, el partido cuenta como mejor embajador con el exasesor de Federico Trillo en el Ministerio de Defensa Rafael Bardají, que fue una de las cabezas de la Fundación FAES de Aznar y que ha firmado con frecuencia como articulista en publicaciones militares por presidir el Grupo de Estudios Estratégicos GEES. En marzo pasado, en un acto de presentación de la nueva ejecutiva de Vox, Bardají, que ahora es vocal de Vox, tildó al evento de “la Covadonga 2.0 de la reconquista de España”.