PRIMER JUICIO DEL 'PROCÉS'
El fiscal acusa a un concejal de Badalona de coaccionar a policías locales por el 1-O
El que fuera teniente de alcalde, Josep Téllez, cogió de un coche patrulla unos carteles del referéndum decomisados El acusado asegura que él actuó de 'mediador' entre los agentes y un grupo de activistas independentistas
La fiscalía ha acusado este jueves al concejal y exteniente de alcalde de Badalona, Josep Téllez, de "aprovecharse de su cargo" y de actuar de forma "coactiva" al exigir el 25 de septiembre del 2017 a agentes de la Guardia Urbana de esta localidad que devolviera a un grupo de activistas carteles de propaganda que, a su entender, estaban vinculados al referéndum unilateral del 1-O. La acusación pública ha reclamado para el concejal seis meses de prisión e inhabilitación por un delito de desobediencia grave. La defensa ha solicitado la absolución. El juicio ha quedado visto para sentencia en un juzgado de la Ciutat de la Justícia de Barcelona.
Los hechos se remontan a las 23.25 horas del 25 de septiembre del 2017, días antes del 1-0, cuando un grupo de cinco activistas independentistas estaban colgando unos carteles con la leyenda 'Hola Europa', 'Hola República', 'Hola nou país' y el anagrama 'Sí'. Una patrulla de la Guardia Urbana de Badalona se topó con esta acción y requisó a los simpatizantes soberanistas 45 carteles y seis paquetes de bridas de plástico. Mientras los agentes confeccionaban el acta del decomiso, el grupo se fue haciendo cada vez más numeroso, hasta llegar a una veintena, entre ellos se encontraba el que era presidente de Òmniun Cultural, Jordi Cuixart, encarcelado por la causa del 'procés' . Los ánimos se fueron caldeando e, incluso, algunas personas empezaron a insultar a los miembros de la policía local. "Sois unos facistas, unos ladrones", "no tenéis verguenza", les gritaron.
LIBERTAD DE EXPRESIÓN
Téllez había llegado al lugar mientras los agentes levantaban el acta. Según ha declarado, estaba yéndose a a su casa en bicicleta con una amiga cuando se topó con la actuación policial. Se acercó donde estaban los guardias urbanos para saber qué estaba pasando. La fiscalía sostiene que exigió a los policías locales que devolvieran los carteles a los activistas, mientras que el acusado ha recalcado que él solo pretendió actuar de "mediador" para calmar los ánimos y "garantizar la libertad de expresión". Como los agentes le dijeron que no podían entregar los carteles a los congregados, el que entonces era teniente de alcalde se acercó al coche patrulla y los cogió del maletero que estaba abierto, repartiéndolos entre los activistas que, al grito de "hem guanyat, visca la República", se alejaron de la zona.
Téllez ha negado que exigiera nada a los agentes y ha recordado que la que en esos días era alcaldesa de Badalona, Dolors Sabater, había remitido una queja a la fiscalía alegando que a la policía local no se le podía atribuir la función de confiscar el material vinculado al referéndum unilateral que había sido prohibido por el Tribunal Constitucional. Los tres agentes que actuaron han detallado que ellos se limitaron a cumplir con la instrucción de la fiscalía de requisar la propaganda del 1-0 e insistieron que el regidor les conminó a entregar a los activistas los citados carteles.