El Congreso dice adiós a la espera de los decretos de Sánchez y las listas electorales

agencias | madrid

El Congreso se ha despedido este jueves de una de las legislaturas más convulsas e intensas en términos políticos de la democracia, aunque no parece que durante los próximos días cese la actividad a tenor de la voluntad del Gobierno de enviar decretos leyes a la Cámara y de las inevitables disputas en los partidos por la configuración de las listas electorales.

El baile de los nombres para ocupar determinados puestos privilegados en las candidaturas del 28 de abril y del 26 de mayo, fechas de las elecciones generales y autonómicas y municipales, respectivamente, lleva días produciéndose, aunque ha sido este jueves cuando ha cobrado más vigor porque ha podido ser el último pleno para un nutrido número de diputados.

El portavoz de ERC, Joan Tardá, parlamentario desde 2004, cara visible de la política nacional de los últimos años, ha eludido confirmar si volverá a estar presente en la lista de su formación para el Congreso. Preguntado por los medios sobre su despedida, ha afirmado: «Es posible».

Los ministros, de salida

Los partidos, o quienes los forman, andan revueltos con su futuro. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tiene previsto colocar a sus ministros en puestos clave de las listas, lo que provocará una renovación destacada. Como renovación habrá en Unidos Podemos, pues repetirán una veintena de más de 60.

Menos trauma se espera en Ciudadanos. Repetirán la mayoría salvo los que ya han comprometido su futuro con otros cometidos. Son Toni Cantó, candidato a la Comunidad Valenciana, o Félix Álvarez «Felisuco» para la Presidencia de Cantabria.

Francisco Igea ha presentado su candidatura a presidir la Junta de Castilla y León para frenar a la expopular Silvia Clemente, mientras que Luis Salvador aspirará a la Alcaldía de Granada.

Es probable que regrese al Congreso a partir de abril el hoy portavoz del PDeCAT, Carles Campuzano, y nombres relevantes esta legislatura como Irene Montero, Rafa Mayoral o Ione Belarra, los tres de Unidos Podemos, o Miguel Gutiérrez o José Manuel Villegas, de Ciudadanos.

Un conocido político como Rafael Catalá, también del PP, está pendiente de las instrucciones que le dé el partido, aunque supuestamente sus intenciones se dirigen a ocupar nuevamente un escaño, lo que compartiría con la presidenta del Congreso, Ana Pastor. Precisamente ella, tercera autoridad del Estado, ha protagonizado uno de los momentos más emotivos de la jornada al ofrecer a los diputados una intervención, justo antes de clausurar la legislatura, llena de agradecimientos y reconocimientos, de autocrítica y de ensalzamiento del papel del Parlamento en la democracia.

Cierra el Congreso, pero no cesa su actividad gracias a los decretos leyes que se espera se debatan en la Diputación Permanente durante los próximos días. Sin ir más lejos, el del alquiler está cerca de fraguarse porque las discrepancias entre Gobierno y Podemos, por un lado, y con el PDeCAT y PNV, por otro, se han ido limando o remediando, y puede que suceda los mismo con el de igualdad laboral. Es más que probable que el del plan de contingencia ante el «brexit» sea unánimemente respaldado.

Cuando llegue el momento del debate de los decretos, regresará el tono de campaña electoral del jueves o de hace una semana, pero ayer en la Cámara han abundado las lágrimas, los abrazos, los besos, y en general, un ambiente de camaradería muy alejado del fervor por unos votos. Votos de los que el barómetro del CIS de este jueves ha sacado una fotografía. El PSOE se dispara y suma casi más que PP y Cs juntos, algo que representantes de ambas formaciones no han dudado en contradecir incluso con mofa.