Damborenea: «Las actuaciones de Arzalluz no fueron para acabar con ETA»
El parlamentario del PP reconoce que fue una gran figura «para unos buena y para otros no tanto».
efe | bilbao
El parlamentario vasco del PP Antón Damborenea señaló que las actuaciones del expresidente del PNV Xabier Arzalluz, fallecido el pasado jueves, durante la existencia de ETA no fueron «precisamente en favor de acabar con el terrorismo» y añadió: algunos «podríamos decir que todo lo contrario».
El representante popular, en una tertulia en Radio Euskadi con parlamentarios de otros partidos, transmitió el pésame a la familia de Arzalluz y reconoció que el fallecido político «ha sido una figura muy importante», aunque puntualizó que «para algunos habrá sido muy buena y para otros» no tanto.
Según consideró, sus actuaciones no fueron «en favor de acabar con el terrorismo de ETA».
Señaló que cree que recordar que «cuando en el año 80-81 el señor Rosón, ministro de Interior de UCD, llegó a un acuerdo con ETA político-militar para que desapareciera esa banda terrorista» Arzalluz «decía que no se tenían que disolver, que eso no era bueno».
Damborenea rememoró también que tras el asesinato por parte del ETA del concejal popular Miguel Ángel Blanco, se produjeron manifestaciones en la calle «muy importantes» contra la banda terrorista y «al señor Arzalluz y al PNV le da miedo porque es que ‘son de los nuestros’, que era su frase».
«Y automáticamente -añadió- lo que hace es irse al pacto de Lizarra -entre nacionalistas-», y «pactar la tregua con ETA», durante la cual «había una ‘kale borroka’ bestial» que a Arzalluz le parecía «normal».
Además, a los empresarios «se les seguía extorsionando y recuerdo que él decía que ‘de algo tienen que vivir estos chicos’», agregó.
Según Damborenea, Arzalluz «al final terminó con el plan Ibarretxe» y su legado es «el ‘plan Ibarretxe 2’» que, a su juicio, representa el acuerdo entre el PNV y EH Bildu para un nuevo estatus alcanzado en el seno de la ponencia de autogobierno del Parlamento Vasco.
En la tertulia citada, la parlamentaria del PNV Josune Gorospe consideró que Damborenea efectuó una interpretación «sesgada» de los posicionamientos de Arzalluz, una de cuyas «obsesiones», según afirmó, era «la desaparición de ETA».