El Senado revisa los efectos de la suspensión de Romeva

La Mesa del Senado revisará este miércoles los efectos de la suspensión del político de ERC preso Raül Romeva para la composición de la Cámara y la vida parlamentaria, así como sus efectos en los derechos económicos del senador suspendido. Deberá además dar el visto bueno a la reorganización del grupo parlamentario de Esquerra sin él.

Romeva está suspendido del cargo desde la semana pasada al encontrarse en prisión preventiva y juzgado por el Tribunal Supremo por el proceso independentista catalán. La suspensión fue acordada por la Mesa de la Cámara el pasado miércoles 29 de mayo con efectos retroactivos a la toma de posesión del escaño, es decir, desde el 21 de mayo.

En su reunión del miércoles pasado, además, la Mesa decidió encargar a los letrados del Senado un informe jurídico sobre las consecuencias para la Cámara de la suspensión. Por ejemplo, está por decidir si se mantiene el número actual de senadores o se rebaja en uno.

Si Romeva renunciase al puesto, el escaño sería para el suplente en la lista electoral, pero si no lo hace y se prolonga su suspensión la institución debe acordar qué hace. La decisión en cualquier caso no afectará a la toma de decisiones en el Senado, porque el PSOE tiene una amplia mayoría absoluta.

GRUPO CON EH BILDU

La suspensión del político catalán sí tuvo un efecto inmediato para la propia ERC, que perdió a un senador y se quedó sin el número suficiente para formar grupo parlamentario propio junto a EH Bildu. Las dos formaciones presentaron un grupo con diez miembros, como exige el Reglamento, pero se quedaron en nueve tras la medida aplicada al político preso. La Mesa concedió a ERC cinco días más para reorganizarse y este miércoles tomará una decisión sobre la nueva composición.

La baja del político preso se ha cubierto con la llegada al Senado el pasado jueves de una senadora de EH Bildu que estaba pendiente de designar por el Parlamento vasco. Se trata de Idurre Bideguren, que completa así la lista de diez puestos que exige el Reglamento y, en teoría, permitirá que el grupo sea validado por la Mesa.

PRÉSTAMO DE SENADORES

ERC se vio en esta situación al haber prestado a cuatro de sus senadores a Junts para que pudiera formar grupo parlamentario independiente junto a Coalición Canaria y la Agrupación Socialista Gomera.

El Reglamento del Senado permite este préstamo de senadores entre partidos y es una práctica habitual en toda las legislaturas. Una vez que arranca el trabajo parlamentario, el periodo de sesiones, esos parlamentarios pueden volver a su grupo de origen; la cifra de senadores por grupo no puede en cualquier caso bajar de seis.

En la XIII legislatura, el PSOE ha prestado también ayuda a Podemos para que forme grupo parlamentario porque sólo cuenta con cinco senadores. Los socialistas adscritos al grupo morado proceden de La Rioja (Mari Carmen Arana), Cádiz (María Jesús Castro), Cáceres (Javier Garcinuño), León (Constantino Marcos) y Tenerife (José Antonio Valbuena).

Podemos cuenta con cinco senadores pero todos ellos son de designación autonómica y sus malos resultados en las elecciones del pasado 26 de mayo auguran que podría perder alguno. Esta posibilidad pondría en peligro el mantenimiento del grupo, porque es habitual prestar senadores, pero no en un número mayor de los que aporta quien quiere formar grupo.