Albert Rivera amplía su ejecutiva nacional para aislar a los críticos
El líder del Ciudadanos persigue asentar su ‘no es no’ a la investidura de Pedro Sánchez.
Albert Rivera, en una rueda de prensa en el Congreso. VICTOR LERENA
ANDER AZPIROZ | MADRID
Albert Rivera mueve ficha para responder a la rebelión de varios de los dirigentes de Ciudadanos que discrepan con la política de alianzas de la formación liberal, que se puso de manifiesto hace unas semanas con la dimisión del portavoz económico en el Congreso, Toni Roldán. El presidente del partido naranja ha convocado para el próximo 29 de julio una nueva reunión de su Consejo General, el máximo órgano de dirección entre congresos. En este cónclave, el segundo en un mes, se votará una ampliación de la Ejectiva Nacional, que es la encargada de llevar el día a día de la formación. Pasará a contar con un máximo de 50 integrantes, diez más que el límite actual. Esta maniobra, «una reforma de calado», según afirmó ayer el secretario general José Manuel Villegas, permitirá a Rivera incluir en la ejecutiva a un mayor número de fieles, que se justifica por la necesidad de adaptar el órgano al crecimiento del partido naranja y al mayor poder territorial que han conseguido en las elecciones. Esto, en contrapartida, conlleva diluir la influencia de los dirigentes díscolos con su gestión. Rivera se garantiza así el apoyo tanto al inamovible ‘no es no’ a Pedro Sánchez y como a su política de alianzas con el PP como socio preferente, además del el apoyo externo de Vox en los gobiernos de coalición de centro derecha. La decisión de aumentar los integrantes de la ejecutiva nacional se explica, según ha justificado el secretario general, José Manuel Villegas, por la necesidad de adaptar este órgano a la nueva realidad de crecimiento del partido naranja y al mayor poder territorial que han conseguido en las elecciones.
Un mes de tensiones
Las diferencias de criterio en torno a la investidura de Pedro Sánchez dentro de Ciudadanos, una formación que acostumbraba a aprobar sus resoluciones por unanimidad, salieron a la luz hace un mes con la marcha de Toni Roldán. Apoyado por los eurodiputados Luis Garicano y Javier Nart, defendía abrir una negociación que replanteara el veto a Sánchez, pero ya entonces la Ejecutiva lo rechazó por amplia mayoría. El último en sumarse a esa corriente es Francisco de la Torre, responsable de fiscalidad, que ha revelado que se plantea su «participación en el proyecto».