La Manada trata de librarse de 7 años de condena por abusar en Pozoblanco
Cecilia Cuerdo | CÓRDOBA
Los cuatro miembros de La Manada que se enfrentan a siete años de cárcel por los abusos sexuales a una joven en Pozoblanco (Córdoba) se acogieron ayer a su derecho a no responder a las preguntas de las partes, y se declararon inocentes. Su decisión se enmarca en la estrategia judicial de su defensa, que considera que el vídeo que les incrimina, y en los que se les ve manoseando y besando a la víctima, fue obtenido de manera irregular y por tanto es nulo. Sin embargo, no logró que esa grabación se anule antes de la vista.
Alfonso Jesús Cabezuelo, Jesús Escudero, Antonio Manuel Guerrero y José Ángel Prenda —que ya cumplen condena de 15 años de prisión por la violación continuada de una joven en los Sanfermines de 2016— se enfrentan a una pena de tres años de cárcel por abusos sexuales y otros cuatro por un delito contra la intimidad, al difundir el vídeo en grupos de WhatsApp sin el conocimiento ni autorización de la víctima. Cabezuelo además abofeteó a la chica, de 21 años, cuando ella se negó a practicarle una felación.
La validez del vídeo, principal prueba de cargo contra La Manada, centró la sesión de cuestiones previas del juicio. Su defensa considera que se obtuvo vulnerando el derecho a la tutela judicial efectiva y al derecho a la intimidad de las comunicaciones, ya que se descubrieron durante la investigación de otra causa, la violación de Pamplona. El abogado defensor también reprochó que la Policía Foral de Navarra acudiera a Córdoba para localizar a la joven y que pudiera interponer una denuncia que, dice el abogado, no fue voluntaria.
Las acusaciones, sin embargo, rebaten estos aspectos, y recuerdan que fueron los propios acusados quienes dieron autorización expresa al ceder sus móviles voluntariamente y «sin límites» en el marco de esa investigación de los sanfermines. Tanto la acusación particular como la popular —que ejerce la asociación Clara Campoamor— subrayan que los hechos que se investigaban en Pamplona tenían la suficiente gravedad como para buscar conductas similares previas.
El juez se pronunciará sobre la validez del vídeo ya en sentencia, pese a la protesta formal de la defensa. La vista previa se retomará hoy con la declaración de la víctima, que además de pedir que sea a puerta cerrada sin acceso de los medios de comunicación, ha solicitado disponer de un biombo para evitar contacto visual con los acusados. Esgrime para ello el trauma que aún padece, que motivó, según argumenta la asociación Clara Campoamor, un intento de suicidio el pasado verano que acabó en Urgencias.