Abascal tacha a Sánchez de «villano y personaje sin escrúpulos»
El líder de Vox avisa de que no se detiene a Torra por «las necesidades»
Santiago Abascal agotó el repertorio de epítetos contra Pedro Sánchez y su alianza «separatista, comunista, bolivariana y demás» durante su intervención en el debate de investidura. El líder de Vox tampoco se dejó ninguna crítica en el tintero contra los socios de los socialistas.
Comenzó su discurso con una exigencia: «Quim Torra debe ser detenido por un delito de desobediencia». La respuesta del presidente de la Generalitat ante la resolución de la Junta Electoral Central que le despojó de su escaño ha sido, según Abascal, la de «un sedicioso y un rebelde». Pero esa actitud, auguró, se quedará sin castigo porque «en España no hay ley por las necesidades de la investidura de Sánchez».
El presidente del grupo ultraderechista calificó el debate de investidura de «traición navideña y emboscada a la Constitución» porque en el fondo lo que persiguen los socialistas y sus aliados es «la destrucción» de España camuflada de un acuerdo para que Sánchez siga al frente del Gobierno.
El candidato socialista, detalló Abascal, es «un fraude, un mentiroso, un estafador, un personaje sin escrúpulos, capaz de cualquier cosa con tal de seguir en la Moncloa». Es, prosiguió «un villano de cómic, un político indigno que ha cometido el mayor fraude electoral pactando al día siguiente de las elecciones con quien dijo que no iba a pactar, con los socios comunistas, bolivarianos y con los independentistas. Una actitud, subrayó, que demuestra que «nada de lo que diga Sánchez merece el más mínimo respeto» porque es «un charlatán, un timador que viene con una corbata morada», atuendo que el líder de Vox interpretó como un guiño a Podemos, «como podía haber venido con lazo amarillo» de los independentistas catalanes.
Pero no solo se centró en Sánchez, dio un amplio repaso a los socios del PSOE en el debate. Tachó de «caciques» a los dirigentes del PNV que lo mismo «recogen las nueces del terrorismo (de ETA) que las del golpismo en Cataluña». Los nacionalistas vascos, subrayó Abascal, «con tal de debilitar a España» hacen «lo que haga falta», y ahora pactan con los socialistas como antes lo hicieron con el PP.