La torre de control al piloto de Air Canada: «¡Qué bien, macho!»
El Gobierno destaca la capacidad de respuesta del país ante el incidente del avión
«¡Vamos, vamos, vamos!». La torre de control del aeropuerto de Barajas animaba así al piloto de Air Canada justo antes de tomar tierra con su avión averiado en la pista más larga y con un sistema de frenado seguro. Con el avión rodando ya sobre la pista, los controladores respiraron aliviados. Y no pudieron contener un «¡qué bien, macho!» al piloto.
En el interior del avión, aplausos, lágrimas y emoción. Fueron los momentos más tensos. Los de mayor peligro tras el despegue, también. En la puerta de la aeronave de Air Canada, el piloto despidió uno a uno a sus pasajeros.
«Sin problemas. Ni una chispa», cinco palabras en el control aéreo de Barajas pusieron punto final a la angustiosa odisea del Boeing 767-300 ER. Cinco palabras que conjuraron el gran temor de los especialistas durante todo el día: que el rozamiento del averiado tren de aterrizaje contra el asfalto provocara chispas y éstas un incendio. Las imágenes del avión intacto y la inmediata confirmación del comandante de que no había fuego por ningún sitio provocaron un suspiro de alivio en todo Barajas y también aplausos. Los mismos que también se oyeron desde el interior de la aeronave.
El ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Abalos, encomió la capacidad de respuesta del país, de las administraciones y de todos los servicios de emergencias ante el incidente ocurrido en el vuelo AC837 de Air Canada, que finalmente aterrizó en el aeropuerto sin incidencias con todos los pasajeros a salvo.
Ábalos, que se desplazó hasta el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas para seguir el dispositivo articulado para atender el aterrizaje de emergencia, se mostró «orgulloso» de esta capacidad de respuesta ante el incidente.
«Como país, hay que estar orgullosos de la capacidad de respuesta, ha sido prácticamente un simulacro», afirmó el ministro en declaraciones a los periodistas poco después del aterrizaje de la aeronave.
Ábalos hizo alusión al «alto despliegue» de las administraciones, los dispositivos de seguridad, los servicios de Aena y Enaire y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, diciendo que «todos han actuado bien en coordinación y eficacia».
Respecto a las causas que podrían haber originado el fallo técnico del avión, el ministro dijo que «no hay que precipitarse», puesto que el asunto ya ha sido puesto «inmediatamente» a disposición de investigación de accidentes.
Las respuestas a lo que sucedió en la pista de despegue se harán públicas en las próximas semanas.