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Con la distancia recomendada

Los barceloneses hacen cola para comprar y turistas para irse de la ciudad

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Publicado por
León

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Colas ante algunos comercios donde se restringe la entrada para evitar contagios es la tónica dominante este sábado en Cataluña, mientras en el centro de Barcelona numerosos turistas aguardan ante el autobús del aeropuerto, muchos de ellos pertrechados con mascarillas, para volver a casa.

Son mayoría los comercios de alimentación, estancos y farmacias que, para evitar contagios entre empleados y clientes, han optado por restringir la entrada o incluso han dibujado en el suelo líneas rojas para pedir a los clientes que no se acerquen demasiado a los dependientes.

Cataluña ha amanecido con calles más vacías de lo habitual y un centro de Barcelona inusualmente tranquilo, con excepción de la parada del autobús que va al aeropuerto de Barcelona-El Prat, donde numerosos turistas aguardan para abandonar una ciudad que espera a conocer las medidas de confinamiento que adoptará el Gobierno español y donde se aplican ya las anunciadas ayer por la Generalitat.

Aunque la gran mayoría de los establecimientos cumplen la orden del gobierno catalán de cerrar bares, restaurantes y discotecas, algunos 'irreductibles' se han resistido a bajar las persianas, como ha podido comprobar Efe que ocurría en algunos bares de Sabadell (Barcelona), donde la Guardia Urbana les ha conminado a cumplir las normas.

También en un bar de la avenida Meridiana de Barcelona, un cartel aseguraba que estaban abiertos "solo" para entregas a domicilio, pero como los vecinos llenaban el local, la Guardia Urbana les ha conminado a cerrar.

Algunos de los establecimientos donde hay más colas son las panaderías, porque muchos son locales pequeños donde es difícil guardar las distancias.

Muchos parques infantiles están también vacíos o incluso precintados y las carreteras registran menos tráfico que cualquier otro fin de semana.

Algunas de las escenas más extrañas se viven este sábado en el metro de Barcelona, donde la mayoría de los pocos usuarios prefieren ir de pie y guardando distancias.

Irreductibles son también algunos deportistas que hoy corren por las calles con menos competencia de coches y peatones, mientras muchos ciclistas, un fin de semana más, han asaltado las carreteras, como ha ocurrido en las costas del Garraf.