Conrado Blanco compra impresoras 3D para fabricar material sanitario

La fundación Conrado Blanco de La Bañeza ha adquirido varias impresoras 3D para aportar su granito de arena en la lucha contra el covid-19 para que se puedan fabricar pantallas antisalpicaduras para la protección del personal sanitario que atienden a las personas enfermas.

Una idea que surgió de la secretaria de la fundación, Luisa Arias, que se puso en contacto con el responsable de la comunidad ‘maker’ en La Bañeza, Alejandro Cabezas, así como con el coordinador de Castilla y León, para transmitirles la intención de la fundación de comprar dichas impresoras 3D y cedérselas a ellos para que se encargasen de la fabricación como lo llevan haciendo desde hace varios días —superando las 1.500 pantallas antisalpicaduras fabricadas—.

Una propuesta que fue buen recibida por la comunidad ‘maker’, que desde ese momento se ha encargado de realizar todas las gestiones pertinentes. Previsiblemente, las impresoras llegarán a La Bañeza este próximo viernes para que los ‘makers’ puedan contar con más medios para crear este tipo de pantallas. Asimismo, realizarán pomos de puertas para abrir con el codo, piezas para respiradores y mascarillas para ayudar a la protección ante el coronavirus.

Una vez erradicado el problema, la impresoras 3D volverán a manos de la fundación Conrado Blanco, que las dejará en servicio de toda la sociedad bañezana que las pueda necesitar.

También en la comarca del Páramo ha surgido una iniciativa similar que ya funciona desde hace días. A la cabeza están Marcos de Paz Agúndez y Francisco Esteban Marcos, a los se han sumado otros voluntarios para fabricar desde casa pantallas protectoras antisalpicaduras con impresoras 3D. También ha surgido numerosos donantes para la compra del material necesario como la Asociación de Agricultores de Santa María del Páramo, la Asociación El Filandón de Nogarejas, particulares y comercios locales.