Economía
Un desplome histórico del 9,2%
El Gobierno asume que la crisis económica disparará la tasa de paro hasta el 19% y elevará el déficit público a niveles similares a los de la última debacle La caída en picado del PIB acaba con seis años de estabilidad
El Gobierno prevé que el déficit público alcance el 10,34% del PIB este año, hasta los 115.671 millones de euros, el mayor déficit desde el 2012, cuando alcanzó el 10,7%, como consecuencia del impacto de la crisis del Covid-19, con una caída de los ingresos del 5,3%, con 25.711 millones menos respecto al año pasado y un aumento del gasto público del 10,5%, con 57.765 millones de euros más, hasta el 51,5% del PIB. La tasa de paro se disparará hasta el 19%.
Así se desprende del Programa de Estabilidad 2020-2021 remitido el jueves por la noche por el Ejecutivo a Bruselas, junto al Plan Nacional de Reformas, y presentado ayer por la vicepresidenta tercera de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, y la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, en una rueda de prensa telemática en el Palacio de La Moncloa.
Montero explicó que el impacto «enorme» del Covid-19 en la economía mundial y española tienen unos «efectos adversos» que impactan «de lleno» en la evolución de las cuentas públicas, ante «una realidad complicada sin precedentes», por lo que las previsiones son «prudentes» pero «no ocultan la difícil situación».
Asimismo, indicó que la irrupción del Covid-19 modifica «totalmente» el escenario previsto, con una estimación de una caída del PIB del 9,2% este año, lo que obliga a adoptar medidas para reforzar el sistema sanitario, proteger a las familias y dotar de liquidez a las empresas y autónomos. Eso, recordaron, eleva la previsión de déficit público y de deuda pública para el ejercicio actual.
Medidas impositivas
En concreto, el Ejecutivo prevé que el déficit suba hasta los 115.671 millones de euros este año, el 10,34% del PIB, frente al 2,82% del año pasado, lo que supone el mayor déficit desde 2012, cuando se alcanzó el 10,7%.
Este aumento del déficit se debe a una previsión de la caída de los ingresos de 25.711 millones de euros, un 5,3% menos respecto al año pasado, hasta los 461.043 millones de euros, lo que equivale al 41,2% del PIB, 2,1 puntos más que el año pasado debido a la mayor contracción del PIB.
Además, indicó que las medidas para paliar el impacto del Covid-19 supondrán un incremento «importante», «temporal y necesario» del 10,5% del gasto público, con 54.765 millones de euros más que el año pasado, hasta los 576.714 millones de euros, lo que supone el 51,5% del PIB, lo que supone 9,6 puntos porcentuales más que el año pasado.
En este sentido, Montero cifró el impacto de las actuaciones para paliar el Covid-19 en 138.923 millones de euros, derivado de los 104.400 millones de las medidas de liquidez, con un aumento de gasto de 28.403 millones y una minoración de ingresos de 6.120 millones.
Las Comunidades Autónomas, de su lado, recibirán 115.000 millones, un 7,3% más, con un gasto adicional añadido de unos 11.000 millones.
En cuanto a los ingresos, Montero resaltó que a pesar de la caída del 5%, se ha entrado en 2019 con una protección «ala» de las rentas, especialmente de los asalariados públicos por las medidas implementadas por el Gobierno, como la flexibilidad en los Erte o la prestación para los autónomos, con un «alto coste económico» pero manteniendo las rentas.
Este mantenimiento de las rentas y la previsión de una mejora de consumo en la segunda parte del año, con la apertura paulatina de la actividad, explican que la estimación de la caída de ingresos (-5,2%) sea inferior a la del PIB (-9,2%). La estimación de impuestos percibidos por las administraciones este año asciende a 263.443 millones, un 5% menos respecto a 2019.