Medidas económicas
Ayudas de entre 500 y 2.000 euros para dar liquidez al sector del turismo en Castilla y León
Mercado de las tres culturas en San Froilán. RAMIRO
La Consejería de Cultura y Turismo de Castilla y León ha articulado ayudas de entre 500 y 2.000 euros para dar liquidez al sector turístico de la Comunidad ante los efectos del coronavirus, de acuerdo a las bases reguladoras que este lunes publica el boletín oficial de la autonomía, el Bocyl.
En la orden se recoge la importancia del sector en la economía regional, ya que los ingresos generados por los visitantes durante el 2019 ascendieran a más de 2.000 millones de euros, lo que supuso un incremento del 7,6% respecto al mismo período del año 2018.
Destino
En el 2019, visitaron la Comunidad casi 9 millones de turistas, que generaron 15,5 millones de pernoctaciones, y hay en Castilla y León más de 32.000 empresas turísticas, en diversos ámbitos y con distintas estructuras, aunque predominan las pymes y los autónomos, que empleaban a 74.463 personas a 31 de diciembre pasado.
Por ello, la Consejería ha acordado ayudas para dotar de liquidez a las empresas turísticas que están pasando dificultades económicas por la falta de ingresos en el sector, a través de la financiación de los gastos a los que deben hacer frente.
Diferentes fines
Las subvenciones financiarán gastos de empresas turísticas de la Comunidad de Castilla y León derivados de los suministros de electricidad, agua, gas y telecomunicaciones; mantenimiento de instalaciones y maquinaria; y alquiler de locales, o en su caso hipotecas de los establecimientos donde se desarrolle la actividad turística. Y en el caso de hipotecas, el gasto subvencionable no podrá superar el 25 por ciento del gasto subvencionable.
Las ayudas también se dirigen a financiar las cuotas por pertenencia a alguna asociación del sector; gastos de asesoría fiscal, contable o legal relacionados con el Covid-19; o los de mantenimiento de los programas informáticos, entre otros.
La cuantía individualizada de cada subvención se obtendrá detrayendo del importe total de los justificantes de gasto presentados los gastos no subvencionables, no pudiendo ser inferior a 500 euros ni superior a los 2.000 euros