El plan de desescalada de la Junta descarta que las terrazas puedan abrir el día 11

El plan de desescalada que presentó ayer la Junta de Castilla y León al Gobierno descarta que las terrazas puedan abrir en León el día 11. En el caso de que fuera aceptada, tan solo las zonas básicas de salud de Riaño, Truchas y Matallana podrían pasar a la fase 1 por no registrar nuevos casos en los últimos 14 días. En el caso de Matallana, se detectaron tres enfermos, pero sigue en la lista, «porque son puntuales y están aislados», matizó la consejera de Sanidad, Verónica Casado.

El plan enviado al Ministerio de Sanidad afecta a 3.635 habitantes de León (53.000 en el conjunto de la Comunidad) y frena el avance de todas las capitales de provincia a la fase 1.

El presidente de la Asociación de Hosteleros de León, Martín Méndez, señaló que tan solo el 10% de sus asociados, casi 4.000 en toda la provincia, tenían previsto abrir el próximo lunes. La mayoría se oponen a volver a la actividad en las condiciones restrictivas impuestas.

La consejera resaltó que, de ser aceptada esta propuesta, no se podrá entrar en las zonas libres de Covid-19 desde otras, por lo que requerirá de un control estricto de las fuerzas y cuerpos de Seguridad a través de la Delegación del Gobierno. Apeló también a las autoridades locales y a la propia responsabilidad de la población.

«Pedimos paciencia y prudencia», indicó la consejera de Sanidad, Verónica Casado, quien reconoció que «es aburrido estar enclaustrado en casa», pero lo es «mucho más» estar en el hospital, en la UCI o incluso llegar a perder la vida por contagiarse con el Covid-19.

La consejera cree que la población «entiende perfectamente» este retraso en el calendario general que establecía el próximo lunes como referencia para pasar a fase 1, porque estas medidas se toman para no poner en riesgo a los ciudadanos. «Es lo malo de dar calendarios», matizó sobre los plazos anticipados por el Gobierno.

Confía en que los vecinos que vean retrasada ahora la liberación que supone el cambio de fase «no entren en el pique» con otras zonas geográficas que sí accedan a esta situación, porque «no es una prohibición, sino una apuesta por la salud» para «frenar de una santa vez esta enfermedad». Reiteró que «estamos en una crisis sanitaria», en el sentido de que deben primar los criterios sanitarios sobre los económicos, por lo que le ha sorprendido de que algunos alcaldes se hayan dirigido a su departamento para comentar que iban a permitir montar el mercadillo el domingo, a lo que ha contestado que «estamos en fase 0 y eso no se contempla». La consejera cree que el Ministerio de Sanidad aceptará los criterios planteados por Castilla y León, en el sentido de que serán las zonas básicas de salud que sumen al menos 7 días sin nuevos casos Covid-19, las que puedan pasar de fase en la programación de la desescalada, pero ha insistido en aplicar «la premisa de la prudencia» para prevenir de un rebrote «tan feroz» como el vivido en abril. «No es la política, es la salud, lo que ha guiado la propuesta», dijo.

«Nos va quedando menos (para salir), pero no podemos tener más sustos», resumió Casado en referencia a un potencial rebrote. A la hora de proponer futuros avances de zonas básicas de salud, tendrán en cuenta si los nuevos casos que se registran están controlados y aislados y por tanto no suponen un peligro de propagación.

También insistió en que si los casos que se produzcan en alguna residencia del ámbito rural «están controlados y aislados» no deberían suponer un retraso en la desescalada de esa zona sin contagios comunitarios, la Junta no se opondrá a que estas zonas avancen en su proceso.

Información elaborada por:

Ana Gaitero, Alejandro Rodríguez,

José María Campos, Pilar Infiesta

y María Carnero