«Este año se han aplazado, pero a ver en 2021 qué circunstancias hay»

Félix Villafañe compagina su trabajo ya como profesor interino pero aspira a conseguir una plaza fija como profesor de Lengua y Literatura. El confinamiento ha hecho más complejo su estudio de las oposiciones. «Le dedico menos tiempo, intento mantener las clases telemáticas de los lunes, pero no puedo siempre porque a veces me coincide con las tutorías o exámenes», comenta, en relación a que él tiene que continuar trabajando, a pesar de la distancia, con los alumnos a los que ya da clase en la Escuela de Arte de León.

«La oposición exige mucho: el temario, los ejercicios prácticos, la programación o las unidades didácticas, estos últimos aunque son más amenos llevan mucho tiempo», comenta. Él es todo lo constante que puede y que le permite su trabajo, pero añade que la situación actual «y el hecho de que se hayan suspendido no motiva mucho. Además, la tensión de que quedaba poco tiempo te ayudaba y ahora es más difícil de mantener». «Para un opositor que trabaja es una situación sobrevenida que es muy difícil de lidiar», comenta, en relación a la necesidad de compaginar su trabajo con el estudio y al hecho de que su proceso selectivo se haya aplazado, en principio, hasta el próximo año. Este joven de 38 años explica que como ya estaban convocadas las oposiciones en sí no se han suspendido, se han aplazado, «pero el año que viene habrá otras circunstancias». Él lamenta que no haya «programación a largo plazo, nos van informado a corto plazo, ni siquiera a medio, y la incertidumbre desconcierta, pero yo sigo estudiando» a lo que añade: «Como tampoco podemos salir a la calle estamos estudiando, pero un trabajo tan psicológico cuesta, es difícil concentrarse al nivel que hace falta». Eso sí, reconoce que hay compañeros que lo están llevando peor, porque tienen hijos u otras jornadas laborales que ahora con el teletrabajo, que les ha desbordado a todos, y han tenido que abandonar la oposición.