«No podemos dejar de movernos pero el virus puede ir con nosotros»
Mientras no haya una vacuna para el Covid-19, la movilidad será factor de riesgo, especialmente para la población más vulnerable y por los casos asintomáticos, afirma Alberto Hernando de Castro, uno de los autores del estudio sobre la expansión del Covid-19 y la movilidad realizado por el Ifisc y Kiro Dynamics, empresa especializada en estudios de movilidad fundada por Alberto Hernando e Ignacio Barrios.
«No podemos dejar de movernos, pero debemos ser conscientes de que posiblemente no viajemos solos y que el virus venga con nosotros. Es importante no relajarse y acostumbrarnos a ser precavidos sobre todo cerca de personas vulnerables, al menos hasta que tengamos una vacuna», afirma Hernando.
Mantener las precauciones de higiene y ser responsables es lo principal. «Se han comparado las mascarillas con los cinturones de seguridad, pero no es lo mismo: llevar una mascarilla no es tanto por protegernos a nosotros mismos, sino para proteger a los demás. Si vamos a estar en un lugar donde pueda haber población de riesgo, es importante tomar precauciones», insiste.
Ante cualquier rebrote, «la movilidad debe reducirse lo más posible para evitar su expansión. Si nos acostumbramos a estas medidas, podemos evitar la temida segunda ola», comenta.
Kido Dynamics y el grupo en Ifisc colaboraron antes de la pandemia estudiando patrones de movilidad a partir de datos de telefonía, investigando la evolución de aglomeraciones en eventos como partidos de fútbol y su impacto en el tráfico de la ciudad, o los patrones diarios al ir y volver al trabajo, buscando soluciones a partir de entender el fenómeno en detalle.
En 2019 evaluaron la movilidad de la final de la Champions, que atrajo hasta 200.000 visitantes internacionales en Madrid durante varios días, con su consiguiente impacto en el día a día de la ciudad. «Estos datos te permiten generar agregados con mucho detalle en cuanto a cuánta gente viaja de A a B sin necesidad de hacer un seguimiento individual, lo que lo hace la tecnología más segura en cuanto a privacidad», asegura.
El objetivo es «hacer esta tecnología escalable, rápida y barata, y encontrar aplicaciones que resuelvan muchos de los problemas en gestión de movilidad, turismo o retail a los que se enfrentan las administraciones y empresas hoy en día», explica. Al comenzar la epidemia y con ella el estado de alerta, su tecnología «se mostró útil para obtener en pocas horas el estado de la movilidad en todo el país». Kido Dymanics y el grupo en Ifisc trabajó para el Ministerio de Industria suministrando datos para tener seguimiento de la cuarentena en las capitales españolas. El Csic les encargó el proyecto para desarrollar el modelo epidemiológico que permita trazar la evolución del virus ante posibles rebrotes. «En este contexto, nos llamó la atención de los casos de Soria o Ciudad Real al presentar una incidencia tan alta en comparación con el tamaño de su población, ya que típicamente se espera esa incidencia en grandes ciudades muy densas como Madrid y Barcelona», explica. De este modo, hallaron en la movilidad el factor más relevante en la expansión durante las semanas anteriores a la cuarentena. «Intercambian menos viajeros con Madrid que Barcelona, pero representa en relativo a su población un impacto muchísimo mayor», resalta.