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Sondeo de intención de voto del Instituto DYM para Diario de León

La crisis deja el arco político en tablas y permite rearmarse al PP

El PSOE de Sánchez se deja diez escaños mientras que los populares podrían pasar de 89 a 108

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León

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La crisis provocada por el Covid y la política de bloques generada por los pactos de Pedro Sánchez le hacen perder al menos nueve escaños según el barómetro realizado por el Instituto DYM para DIARIO DE LEÓN. El PSOE perdería casi un tres por ciento de los apoyos que logró en los últimos comicios, y pasaría de un 28,3% al 25,3%. Sin embargo, lo que se deja en la gatera no se queda en la izquierda puesto que el partido que más apoyos pierde es Unidas Podemos. La coalición de Pablo Iglesias y Alberto Garzón pasa de 35 a 30 diputados en el mejor de los casos. En el peor, se conformaría con 27.

El PP logra un respiro y se convierte en el partido que más crece y conseguiría, de celebrarse hoy las elecciones, una horquilla de diputados de entre 105 y 108, alejándose de Vox, que descendería hasta los 47 escaños. Por último, Ciudadanos recoge los frutos de la estrategia de Inés Arrimadas con Pedro Sánchez y casi podría doblar el porcentaje de apoyos, pasando de 10 a 18 diputados.

Una de las consecuencias de esta foto fija es que el sistema de bloques ideológico volvería a ser rígido debido al descalabro de los podemitas y el receso del PSOE. La suma de PSOE, UP y los minoritarios suman 185 escaños, mientras que el PP, Vox y Ciudadanos se quedarían en 173. Sin embargo, el equilibrio de fuerzas se vuelve frágil, puesto que Teruel Existe, Foro, Coalición Canaria, el partido de Revilla y Nueva Canarias podrían ceder sus actuales diputados y quedaría a tres del frente de izquierdas. El papel de Ciudadanos se volvería —con estas cifras— determinante.

Arrimadas, la más valorada

La presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas, se ha convertido en la líder más valorada, con un 3,8 por ciento mientras que Pablo Iglesias se queda en un 2,7 y Santiago Abascal —el peor clasificado— un 2,6.

Más de la mitad de los españoles tiene poca o ninguna esperanza en el futuro y el 56 por ciento de los ciudadanos consultados cree probable o muy probable perder su empleo cuando pase la epidemia. Por último, los consultados suspenden tanto la acción ejecutiva del Gobierno como la de las Comunidades Autónomas.