Fue detenido en cumplimiento de una orden de busca y captura dictada en 1992 por la Audiencia PERSECUCIÓN INTERNACIONAL A ETA
Venezuela expulsa al etarra Galarza para que cumpla condena en España
El presunto etarra Juan Víctor Galarza Mendiola ingresó en la tarde de ayer en una prisión madrileña, tras ser expulsa
Galarza Mendiola fue detenido el pasado viernes en la ciudad venezolana de Valencia (dentro del estado de Carabobo), situada a unos doscientos kilómetros de la capital, Caracas. Sobre él pesaba una orden de busca y captura dictada en 1992 por la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, después de que el Tribunal Supremo confirmase la condena de seis años de cárcel que le impuso la primera por colaborar en labores de infraestructura con el comando Vizcaya de ETA. Este presunto etarra salió de Venezuela el pasado sábado vigilado por dos policías locales, quienes le acompañaron en su vuelo hacia Madrid, donde llegó pasadas las cuatro de la tarde de ayer. Tras aterrizar en el aeropuerto de Barajas, fue conducido a un centro penitenciario por orden de la magistrada de la Audiencia Nacional Teresa Palacios (en funciones de guardia esta semana), a la espera de que en los próximos días el tribunal que le juzgó haga efectiva de forma oficial su sentencia. Según fuentes judiciales, Juan Víctor Galarza no tiene, en principio, otras causas pendientes con la justicia española, aunque este dato deberá ser comprobado esta semana por los seis jueces de instrucción de la Audiencia. En los años ochenta ya fue absuelto de la acusación de colaborar en dos asesinatos cometidos por la banda terrorista, a cuyos pistoleros habría ofrecido informaciones concretas sobre las víctimas: un policía nacional y un brigada de la Armada. A pesar de esa entrega, España sigue reclamando a Venezuela la extradición de otros siete presuntos miembros de la organización etarra, quienes viven en el país desde 1979 merced a un convenio suscrito pocos años después entre los Gobiernos de ambos países, entonces dirigidos por Felipe González y Carlos Andrés Pérez. Se trata de Jesús Ricardo Urteaga Repullés, Eugenio Barrutiabengoa Zabarte, Miguel Ángel Aldana, Martín San Sebastián Aguirre, Luis María Olalde, José Lorenzo Auyestarán y Ramón Sagarzazu Gaztelumendi. Su detención ya ha sido ordenada por la Justicia venezolana, aunque se desconoce su paradero. Relación con el MLNV Dos de cada tres presuntos terroristas detenidos durante los cinco primeros meses del año pertenecían o mantenían relación directa con alguno de los organismos del entramado legal del Movimiento de Liberación Nacional Vasco MLNV. Según los datos oficiales del Ministerio del Interior, 67 de los 104 detenidos militaban en alguna de estas asociaciones. Un total de 23 de los arrestados habían pertenecido a las juventudes radicales vascas: 8 de ellos a Jarrai y 15 militaban en el momento de su captura en Segi. Otras 20 personas arrestadas habían sido o eran miembros de la coalición bajo sus tres denominaciones: dos de ellos pertenecían a EH, dos a Askatasuna y 16 a Batasuna.