La ley partió de una inocente sugerencia del PSOE

La Ley Orgánica de Partidos Políticos aprobada ayer y en la que José María Aznar lamentó no haber pensado antes, tuvo su punto de partida en una inocente sugerencia del PSOE. Reunión de la comisión de seguimiento del pacto antiterrorista del pasado 20 de noviembre: en la conversación, el dirigente socialista Juan Fernando López Aguilar deslizó la idea de reformar la ley de 1978 como vía para situar fuera de la ley a Batasuna. El vicepresidente y ministro de Interior, Mariano Rajoy, con cara de no dar importancia al dato, dijo: «tomo nota». No se supo más del asunto. Los juristas del Ministerio de Justicia e Interior, sin embargo, se pusieron a preparar un texto que sirviera de base a un proyecto de ley. El PSOE ignoraba estos movimientos y también estaba en la inopia de un encuentro en el palacio de La Moncloa al más alto nivel el 17 de febrero, en el que José María Aznar no estuvo. De esta reunión surgió todo.