En esta votación el Gobierno no ha contado ni con el apoyo de sus fieles, CiU y CC, quienes se abstuvieron
Los diputados del PP aprueban en solitario el decreto de reforma laboral
Los diputados populares se quedaron solos en el Parlamento a la hora de aprobar el Real Decreto Ley, que reformó el mercado laboral el 27
En general las críticas de la oposición giraron tanto sobre la forma como sobre el fondo de la reforma. Estos partidos reiteraron su petición de que el 20-J se respete el derecho al ejercicio de la huelga y descartaron que los sindicatos hayan podido negociar algo y mejorar los cambios. PSOE, IU, PNV y Grupo Mixto acusaron al Gobierno de «autoritario». Por su parte, CiU y CC también lamentaron que la reforma haya entrado en vigor vía Decreto, conducto «precipitado», y anunciaron que tratarán de mejorar su contenido durante su tramitación como proyecto de Ley. El titular de Trabajo y Asuntos Sociales, Juan Carlos Aparicio, fue el encargado de defender el contenido, la necesidad y la urgencia del Decreto. Reiteró que el texto no recoge recortes y argumentó que los cambios se deben introducir sin esperar a situaciones de emergencia financiera que requieran reformas profundas, tal y como ocurrió en 1992 (en alusión a otro Decreto, en aquella ocasión del Gobierno socialista PSOE, que redujo el tiempo y la cuantía de la prestación de paro). Dijo, además, que es prioritario conseguir la recomendación europea del pleno empleo en el año 2010. En consecuencia, resaltó que «España necesita más cambios y menos conflictos» y criticó el inmovilismo y la falta de alternativas de sindicatos y socialistas. Por el PSOE tomó la palabra su responsable de Economía, Jordi Sevilla. Destacó que antes de imponer una reforma laboral por Decreto, el Gobierno debía haber dotado al Instituto Nacional de Empleo (Inem) con recursos necesarios para equipararse a los sistemas europeos; concluir las transferencias a las comunidades autónomas (CC. AA.); evaluar el resultado de las políticas activas de empleo que mueven muchos millones de euros; reformar la formación profesional para conseguir su eficacia; atajar el fraude en la contratación temporal; y alcanzar el consenso con las CC. AA. y ayuntamientos para dotar de incentivos a la contratación estable. Para el coordinador de IU, Gaspar Llamazares, al Gobierno se le «ha atragantado» su mayoría absoluta. Durante su intervención echó de menos el comportamiento del PP cuando estaba en mayoría relativa. Fue de los pocos que mostró su apoyo activo al paro.