El etarra no contestó a las preguntas del fiscal, reconoció su pertenencia a la banda y fue expulsado
Carrera: «Buesa fue objetivo por ser responsable del conflicto vasco»
Asier Carrera, uno de los presuntos etarras acusados del atentado que costó la vida en Vitoria al político socialista Fernando Buesa y a su esc
En el juicio que comenzó ayer en la Audiencia Nacional, el representante del Ministerio Público acusa a Carrera, al también presunto etarra Luis Mariñelarena y a Diego Ugarte, actualmente en rebeldía, del atentado cometido el 22 de febrero de 2000 contra Buesa y su escolta, el ertzaina Jorge Díez. Por su parte, Mariñelarena, quien también reconoció ser miembro de ETA, quiso «denunciar la situación de los cerca de seiscientos presos políticos vascos que se encuentran desperdigados lejos de sus casas», motivo por el que fue amonestado por el presidente de la Sala, quien le pidió que se atuviera a las preguntas del fiscal. La negativa del acusado a obedecer esta advertencia motivó su expulsión de la vista, tras lo cual Asier Carrera, quien asimismo pidió abandonar la sala, comenzó a golpear el cristal de la sala blindada donde se encontraba, y fue también expulsado. En la vista oral declaró Carlos Buesa, hijo del político asesinado, quien relató que su familia tenía conocimiento desde 1995 de que su padre estaba en la lista de objetivos de la banda terrorista. Carlos Buesa afirmó que su padre, antes de la tregua declarada por ETA, contaba con coche oficial y varios escoltas, pero que después de la tregua de ETA de 1999, únicamente contaba con la protección de «un ertzaina que le acompañaba a pie», puesto que ocupaban alternativamente dos escoltas. El fiscal pide un total de 103 años de prisión para los dos acusados. En su escrito de conclusiones relata que los dos acusados y el huido integraban el «comando Ituren» de ETA, que cometió los asesinatos.