Convocados al paro 15 millones de trabajadores
Unos 15 millones de trabajadores y profesionales están convocados hoy para secundar la primera huelga general desde 1994, (140.000 trabajadores en León) un paro que provocará pérdidas calculadas en 250 millones de euros y que tendrá lugar en vísperas de la Cumbre de la Unión Europea en Sevilla. Se prevé, y así lo pronostican los sindicatos, que el país quedará paralizado: salvo excepciones, sólo funcionará el 25% del transporte público -metro, autobuses y trenes de cercanías-, no habrá trenes de largo recorrido, los vuelos quedarán reducidos a un mínimo, en los colegios apenas habrá personal, los periódicos no circularán o sólo lo harán con ediciones reducidas y muchos comercios se verán obligados a cerrar. Según una encuesta del estatal Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), el 50,6% de los españoles está de acuerdo con la huelga, frente a un 34,7% que no lo está. Asimismo, el 53,7% cree que hay motivos suficientes para el paro, mientras que el 37,1% opina que es infundado. También es cierto, sin embargo, que el sondeo refleja que sólo el 34% piensa secundar la huelga -el 54,1% dice que no lo hará-, que la gran mayoría pide que los sindicatos respeten los servicios mínimos y que muchos consideran que la fecha elegida, el día anterior a la cumbre de la UE, está fuera de lugar. El paro generalizado, el primero que enfrentará el presidente del gobierno, José María Aznar, en sus seis años de mandato, y el quinto desde el final de la dictadura franquista en 1975, fue convocado por los sindicatos mayoritarios, Comisiones Obreras (CC.OO.) y Unión General de Trabajadores (UGT) para protestar contra la reforma del sistema de prestaciones para los desempleados decretado por el Ejecutivo. A juicio de las centrales obreras, esta norma recorta drásticamente los subsidios que perciben las personas sin trabajo y los derechos de éstos. El gobierno, en cambio, sostiene que es una medida necesaria para crear más empleo. Hoy se sabrá si la protesta ha sido un éxito para los sindicatos o un triunfo del gobierno. La mayoría de los españoles, que la huelga se habría podido evitar si ambas partes hubiesen sido más flexibles.