Los sindicatos agradecen a CiU su neutralidad
Pujol se ofrece a pactar cambios en el decretazo fuera del parlamento
Convergència i Unió está «abierta» a mantener «cualquier tipo de contacto» con el Gobierno de José María Aznar para introducir cambios negociados en la reforma del paro durante su tramitación en las
Esta es la principal conclusión de la reunión que mantuvieron ayer en Barcelona durante hora y media el presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, y los secretarios generales de UGT y Comisiones Obreras, Cándido Méndez y José María Fidalgo, respectivamente. Pujol fue el primer dirigente político en reunirse tras el 20-J con ambos dirigentes sindicales, quienes le agradecieron la «neutralidad institucional» de la Generalitat durante la huelga. Al encuentro también asistieron el conseller en cap de la Generalitat, Artur Mas; el secretario general de CiU, Josep Antoni Duran Lleida; el portavoz de CiU en el Congreso, Xavier Trias; y el conseller de Trabajo, Lluís Franco. Por parte sindical, estuvieron también presentes los máximos responsables de UGT y CC.OO. en Catalunya, José María Alvarez y Joan Coscubiela. El secretario general de CiU, Josep Antoni Duran Lleida, afirmó al termino de la reunión que su formación está dispuesta a utilizar formas «extraparlamentarias», es decir que vayan más allá de la mera presentación de enmiendas, para lograr introducir mejoras negociadas en la reforma de las prestaciones por desempleo. «No nos negaremos a ningún tipo de contacto», señaló. La reunión con Pujol precede a la que celebrarán hoy con el secretario general del PSOE, José Luís Rodríguez Zapatero, o con el coordinador de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares. Los dos dirigentes sindicales agradecieron que CiU se abstuviera en la votación del «decretazo» y que la Generalitat mantuviera una posición de «neutralidad institucional» durante la jornada de paro, que tuvo en Catalunya un seguimiento superior al del conjunto de España. Por otra parte, el Gobierno quiere seguir hablando con los interlocutores sociales para pactar nuevas leyes o medidas que afecten a los trabajadores, pero mantiene que respecto a la reforma laboral, introducida vía decreto, poco hay que decir puesto que en la actualidad se tramita como proyecto de ley y es a los grupos parlamentarios a los que compite tomar decisiones sobre su contenido. Así de claro lo dejó José María Aznar en su intervención ante los senadores del PP.