El gobierno estudia cómo iniciar el proceso de ilegalización de Batasuna

«No hace falta más evidencia de cuál es la actitud de esta gente, de cuál es la militancia de estos personajes y de qué es lo que defienden y amparan», dijo el alcalde, que anunció que remitirá «a quien tenga la competencia» de aplicar la Ley de Partidos el texto del acuerdo adoptado por el Consistorio, «con los apoyos que ha habido y la negativa que ha habido a firmar». En San Sebastián, el alcalde, Odón Elorza, lamentó que Batasuna haya «guardado silencio», negándose a suscribir el texto de condena aprobado por la Junta de Portavoces del Ayuntamiento donostiarra. En Bilbao, el PP ha solicitado esa reunión de la Junta de Portavoces, para dar a Batasuna «una oportunidad de oro para desvincularse por completo del terrorismo», en palabras de Iturmendi. Ausencia de abertzales En las capitales, Batasuna no se sumó a las condenas, pero en otras instituciones prefirió ausentarse para no tener que votar los manifiestos. Así lo hizo en las localidades guipuzcoanas de Irún y Rentería, cuyo alcalde, el socialista Miguel Buen, aseguró que no fue posible localizar a los ediles abertzales ni en estas localidades ni en la villa vizcaína de Portugalete. Ante esta situación, el PP ha decidido mover ficha. Su presidente en el País Vasco, Carlos Iturgáiz, anunció que su partido presentará mociones de condena en todo los ayuntamientos para que la formación abertzale se pronuncie sobre el último atentado de ETA. De confirmarse el silencio de Batasuna, dijo, habría que promover su ilegalización «cuanto antes». Desde el PSOE, las miradas se centraron tanto en Batasuna como en el PNV. A la formación abertzale le recordaron que la Ley de Partidos contempla la no condena de atentados como un motivo de ilegalización, pero al partido que preside Arzalluz le lanzaron dos mensajes: que exija a Batasuna esa condena y que luche por aislar a los violentos. Zapatero pidió a los nacionalistas que demuestren así que son «demócratas de buena fe». Zapatero, que participó en la concentración de repulsa que se celebró en Santiago de Compostela, recordó al PNV que «cuando se es demócrata de buena fe», «el objetivo es acabar con los violentos, lo que incluye a los que de una forma u otra colaboran con la violencia», en clara referencia a Batasuna. El mensaje al lendakari Ibarretxe es muy claro: «Todos los demócratas deben tomar nota de las actitudes en relación con la condena de este y todos los atentados», dijo.