Rouco defiende que no existen objeciones éticas en la Ley de Partidos

Sobre el término terrorismo, aseguró que «desgraciadamente la Iglesia lo conoce mucho» y agregó que usan este término en algunos textos de la Conferencia Episcopal. Apuntó que existe un plan de acción pastoral para clarificar lo «antimoral y anticatólico» que es el terrorismo y recordó que hay un compromiso del Episcopado Español de hacer un estudio sobre el origen, las causas y consecuencias de ETA. Respecto a los acuerdos de España con la Santa Sede, Rouco consideró que «son buenos y tienen futuro» porque están redactados «de forma flexible para posibilitar una actualización permanente», y agregó que «sería una equivocación dejarlos fuera de la vida española». Contra la ley Por su parte, el sacerdote navarro Jesús Lezaun, uno de los 358 curas de la Coordinadora de Sacerdotes de Euskal Herria que firmaron en junio una carta en contra de la Ley de Partidos Políticos, arremete de nuevo contra ésta y la ilegalización de Batasuna desde las páginas del diario Gara, del que es habitual colaborador. En su artículo La justicia, que apareció ayer en la sección de opinión del periódico próximo a la izquierda abertzale, Lezaun inserta críticas a la Ley de Partidos, sin mencionarla, y, en concreto, a lo que entiende él como carácter «retrospectivo» de la misma o al hecho de que tome como «delincuentes» a las instituciones y no a las personas. «Antes se decía que las instituciones de cualquier tipo no delinquían, sino las personas. Ahora, como lo que estorba son precisamente esas instituciones, se hacen leyes para hacerlas desaparecer como tales», subraya el sacerdote Lezaun. Este sacerdote de 76 años estaba adscrito a la parroquia de El Salvador de Pamplona hasta el momento de su jubilación. También pertenece al colectivo Herria 2000 Eliza, firmante del Pacto de Lizarra. Postura de CiU El portavoz de CiU en el Congreso, Xavier Trías, reiteró ayer el desacuerdo de su partido con que se repitan las discusiones sobre el asunto de la ilegalización de Batasuna en el Congreso, habida cuenta de que está reciente el trámite parlamentario de la Ley de Partidos. «El debate ya se hizo y reproducirlo es un error y sólo genera enfrentamientos entre partidos», aseguró. Hay que recordar que, aunque respaldó la ley, votó en contra del párrafo que contempla que el Congreso o el Senado ilegalicen a un partido.