El PML suspende las marchas a Melilla, pero quiere la anexión
El Partido Marroquí Liberal (PML) decidió ayer suspender las dos marchas a Melilla convocadas para el lunes y el miércoles, aunque mantiene que tanto esta ciudad como Ceuta pertenecen a Marruecos y así debe plantearse en la reunión de septiembre entre los ministros de Exteriores de ambos países. La decisión se adoptó tras una reunión con representantes de asociaciones musulmanas melillenses celebrada esta tarde en la provincia marroquí fronteriza de Nador, reunión que representa la culminación de varios contactos emprendidos por la Comunidad Musulmana y la Asociación Musulmana de Melilla, integradas en la Comisión Islámica de la ciudad. El vicepresidente nacional del PML, Abdelmounin El Chouki, explicó a los periodistas tras el encuentro que su partido «no tiene nada contra los melillenses y está dispuesto a defenderlos en Nador y en Marruecos», pero es contrario «a la política falsa de José María Aznar y su delegado en Melilla, Arturo Esteban, que no puede hacerse con un país vecino». El PML decidió renunciar a todas sus medidas de protesta en torno a la frontera entre Melilla y Marruecos hasta que se celebre en septiembre la reunión entre los ministros de Asuntos Exteriores español y marroquí, Ana Palacio y Mohamed Benaisa, respectivamente, para no «entorpecerlas». Ello no significa que este partido haya variado su postura acerca de Ceuta y Melilla, que considera «territorios ocupados pertenecientes a Marruecos», por lo que El Chouki dijo que «es el primer asunto» que Benaisa debe plantear a Palacio «por motivos históricos y geográficos». Día histórico El dirigente del PML afirmó que «hoy es un día histórico para las relaciones entre melillenses y nadorenses porque al final con el diálogo sincero y no con los buques -en alusión al refuerzo naval de la Armada en Melilla- se solucionan los problemas». Por su parte, el portavoz de las asociaciones musulmanas melillenses, Abderraman Benyahya, expresó su «satisfacción» por el resultado de unos contactos cuyo objetivo era «al margen de las motivaciones del PML, que están legitimadas como partido marroquí, evitar un perjuicio a las economías de familias que nada tienen que ver con un conflicto entre Estados». Defendió la necesidad de «normalizar» la situación porque la frontera entre Melilla y Marruecos, de la que viven numerosas familias de ambos lados, «debe ser una puerta de entrada, un nexo permanente entre pueblos y no una verja cerrada que marque diferencias entre vecinos». Benyahya expresó su esperanza en que la reunión entre Palacio y Benaisa implique «relaciones fructíferas y la vuelta al Acuerdo de Amistad».