Antiguos miembros del GIL fundan un partido para acabar con la dictadura de esta formación
El Partido Reformista Independiente de Marbella y San Pedro de Alcántara (PRIMSP) celebró ayer su acto de presentación oficial en la localidad malagueña con un principal objetivo: «Nacer y concurrir a las elecciones municipales de Marbella para acabar con la dictadura total y absoluta de los once últimos años de gobierno del Grupo Independiente Liberal (GIL)». El partido está integrado por ex miembros del GIL, avalado por el que fuera presidente de Ceuta, Antonio Sampietro, y presidido por Francisco Garrido. Este último manifestó ante el centenar de asistentes que fueron al acto que Marbella «es un barco que va a la deriva porque su capitán ha sido inhabilitado y quedan sólo cuatro en el barco por intereses personales». En este sentido, se mostró convencido de que esta formación «ganará las elecciones y gobernará honradamente» y criticó los «graves problemas de fondo» que tiene a su juicio el Ayuntamiento marbellí, «empezando por el económico, siguiendo por el saneamiento, la seguridad y la limpieza entre otros». El secretario general del PRIMSP, Jose María Garibi, avanzó además que esta fuerza política, será «local e independiente, alejada de obediencias y directrices de carácter nacional o regional» y abogó por «consolidar Marbella, de manera democrática y transparente». Así, hizo referencia al eslogan del partido que reza «Gobierna tu ciudad, ven al PRIMSP» indicando que representa «la realidad de un proyecto de gobierno» y hace un llamamiento a «militantes que estén dispuestos a trabajar por Marbella». Garibi resaltó que la ciudad «se la juega en las próximas elecciones» y pidió a la ciudadanía «que no comprometa su futuro apoyando políticas en fase terminal». Desmoronamiento El que fuera presidente de la Ciudad Autónoma de Ceuta, Antonio Sampietro, aseguró que la llegada del PRIMSP al panorama electoral es la «garantía más eficaz de eliminar la corrupción, el despilfarro, el desgobierno, la prepotencia y la voluntad» y añadió que el «desmoronamiento del desgobierno del GIL, se inició mucho antes de la inhabilitación de su líder». Sampietro, que fue además teniente de alcalde del GIL en Marbella, indicó que «no nos avergonzamos de haber sido en su día piezas importantes de la primera política que llevó a cabo el GIL», al tiempo que matizó que «desengañados por el personalismo de su presidente y por el alejamiento de los principios que lo habían inspirado dejamos el partido». Para el ex presidente ceutí «es la hora del cambio, de la serenidad y de la moderación».