54 años de cárcel para los asesinos del fiscal Portero

La Audiencia Nacional ha impuesto una pena de 54 años de cárcel a los etarras Jon Igor Solana y Harriet Iragi, como autores del asesinato el 9 de octubre del 2000 en Granada del entonces fiscal jefe del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, Luis Portero. Los dos condenados, miembros del último comando de la banda desarticulado en la comunidad andaluza, también deberán indemnizar a la viuda y a los cuatro hijos de su victima con 750.000 euros, suma que dada su insolvencia deberá ser sufragada por el Estado a través del fondo previsto para los damnificados por el terrorismo. Para salvar cualquier posible duda jurídica, los magistrados de la Sección Segunda de lo Penal han preferido obviar la confesión que Solana hizo ante la Policía y ratificó después en el propio juzgado, para recurrir a las «numerosos» testimonios y pruebas periciales que existen en su contra. La autoría material de los disparos que acabaron con la vida de Portero no queda despejada, aunque esta circunstancia no impide que los dos acusados sean castigados por un delito de asesinato terrorista.