Pablo Casado liga su futuro a Ayuso y apuesta por que gobierne en solitario

El adelanto electoral en Madrid ha provocado un terremoto político que ha llevado a todos los partidos a replantear sus estrategias electorales, conscientes de que estos comicios tendrán también una lectura en clave nacional.

Para el PP, una victoria de Isabel Díaz Ayuso el próximo 4 de mayo —los sondeos señalan que la presidenta regional puede dar un salto de más de veinte diputados— podría servir como trampolín a Pablo Casado para tratar de llegar a Moncloa.

«Lo que va a pasar va a ser clave para que yo sea presidente del Gobierno cuando se convoquen elecciones», vaticinó este miércoles el líder de los populares, durante el acto de presentación de la candidatura de Díaz Ayuso.

El sucesor de Mariano Rajoy ligó su futuro al de la candidata madrileña, cuyo liderazgo está al alza, y confió en que la historia se repita y que su reelección al frente de la Comunidad de Madrid juegue un papel fundamental como tuvo en 1995 la llegada de Alberto Ruiz-Gallardón a la alcaldía de Madrid para el ascenso de José María Aznar a la Presidencia del Gobierno. Casado tiene todas las esperanzas puestas en el 4-M, donde pondrá a prueba la reunificación del bloque de centroderecha en torno a las siglas del PP y donde aspira además a gobernar «con las manos libres», sin depender de Vox o Ciudadanos.

El partido conservador espera absorber en las urnas a la formación de Inés Arrimadas y que Vox obtenga el 5% necesario que le otorgue representación en la Asamblea de Madrid pero que se vea obligado a elegir entre dar el gobierno a Díaz Ayuso o ser el responsable de que sea la izquierda quien acabe formando el futuro Ejecutivo madrileño.

«Si tan bien lo ha hecho en los peores momentos, imaginaos cómo lo haría aplicando el programa electoral sin estar parando las ruedas cada vez que otro partido pide algo», dijo ayer Casado, consciente de que tener que gobernar en coalición con la formación de Santiago Abascal puede desvirtuar la imagen de partido de centro que quiere dar en su camino a la Moncloa.

Bienvenida a Cantó

El dirigente popular aplaudió la diversidad de perfiles que existe en su partido, que a lo largo de los últimos cuarenta años ha acogido a militantes del CDS, la UCD, o la Unión Mallorquina y que ahora ha abierto sus puertas para dirigentes de Ciudadanos que estén desilusionados por el rumbo del partido. «Aquí a nadie le preguntamos de dónde viene sino hacia dónde quiere ir para defender a España y a la libertad», remarcó Casado en alusión a Toni Cantó, exportavoz de los liberales en las Cortes valencianas, que figura en el quinto puesto de la lista de Díaz Ayuso.

El fichaje del exlíder de Ciudadanos en la Comunidad Valenciana provocó un choque de la candidata con la dirección nacional. La presidenta madrileña quería marcar los tiempos en todo lo referente a su lista electoral para el 4-M y, además, había manifestado su intención de incorporar en los primeros diez puestos de la lista a los consejeros que la han acompañado durante este año y medio de Gobierno, marcado por el coronavirus y las tensiones con el que fuera su socio en el Ejecutivo. «Es un activo muy especial», dijo de Cantó, del que ensalzó también que «defiende con pasión sus ideas».

Ayuso sacó pecho de su equipo, con especial énfasis en su número dos, el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, quien, destacó, «se ha desvivido para hacer frente a esta pandemia» y defendió que los madrileños «quieren ser libres» y no quieren que «nadie les trate como ganado».