Belarra promete dejarse la piel para llevar a Podemos «lo más lejos posible»

La ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, tiene desde ayer en sus manos el futuro de Podemos tras varios años de trabajo entre bambalinas, siempre fiel a Pablo Iglesias y a Irene Montero, con quien compartió aulas cuando estudió la carrera de Psicología. Prometió «dejarse la piel» para llevar al partido morado «lo más lejos posible» y «ganar» las próximas elecciones; y agradeció a Pablo Iglesias todo su trabajo. «Sin él, Podemos no existiría». La nueva líder logró el 88,69% de los votos. Los inscritos confirman a Montero como su ‘número dos’ y elevan escala considerablemente dentro del Consejo Ciudadano al coordinador autonómico de Castilla y León, Pablo Fernández, que pasa del puesto 16 al octavo lugar.

Nacida el 25 de septiembre de 1987 en Pamplona, Belarra será la primera navarra que dirige un partido político de ámbito nacional y la primera mujer que llevará el mando de Podemos. Será la encargada de conducir la nueva etapa de los morados sin Iglesias, de momento con aparente continuidad, porque ha incluido en su equipo a la mayoría de los cargos que ya estaban en la Ejecutiva anterior. Dicen de ella sus compañeros que es perfeccionista, trabajadora y que su estilo es cien por cien Podemos, con ese tono duro para criticar a la oposición, a la derecha e incluso a sus socios del PSOE en el Gobierno, y para verbalizar sin tapujos las discrepancias, aunque algunos en ello vean una falta de empatia.

Su entrada en el Gobierno como ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030 tras la salida de Iglesias fue el primer gran salto de la navarra en Podemos, partido al que ahora tiene el reto de reflotar, de hacerlo ‘crecer’, como ha prometido a los militantes, y de mantenerlo en pie sin Iglesias, pero con todo su equipo. En 2018 pasó de la última fila del Congreso a sustituir en su baja de maternidad a Irene Montero.