Diario de León

Casado centra su estrategia contra la despoblación en ayudas a la natalidad

El líder popular presenta un decálogo para revertir la situación de la España vaciada

El presidente del PP, Pablo Casado, en la clausura de las jornadas demográficas en Toledo. ISMAEL HERRERO

El presidente del PP, Pablo Casado, en la clausura de las jornadas demográficas en Toledo. ISMAEL HERRERO

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EFE

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El presidente del PP, Pablo Casado, presentó ayer un decálogo para afrontar el reto de la despoblación en España, que empieza con medidas de apoyo a la natalidad e incluye también rebajas fiscales, digitalización, abaratamiento del suelo e igualdad de acceso a los servicios públicos. Casado fue el encargado de cerrar las Jornadas de Reto Demográfico y Desarrollo Rural, que se celebran en Toledo, organizadas por la Fundación Concordia y Libertad, en un acto en que ha estado acompañado por el presidente nacional de la organización agraria Asaja, Pedro Barato, y el presidente del PP de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, entre otros ponentes.

El presidente nacional del PP señaló que están en riesgo de despoblación el 42% de los municipios españoles, un porcentaje muy superior al de países de la Unión como Francia o Alemania, y recordó que su modelo se basa en la libertad de elegir dónde quiere vivir cada uno, pero con igualdad de oportunidades. También recordó que su partido ya ha planteado un pacto de Estado con las diez medidas sobre las que se debiera trabajar.

La primera es el fomento de la natalidad, siguiendo la estela de lo que se está haciendo en Galicia o lo anunciado por Díaz Ayuso en Madrid con ayudas directas por hijo para las mujeres menores de 30 años; acompañado de mayor flexibilización del mercado de trabajo «sin tanto presencialismo» o la gratuidad de la educación de 0 a 3 años.

Otra medida es garantizar la igualdad de acceso a los servicios públicos con escuelas, consultorios médicos y transporte público, lo que requiere de un nuevo modelo de financiación autonómica. Hay que mejorar, según Casado, las infraestructuras del interior, tanto las de carreteras como las ferroviarias y las patrimoniales ligándolas al turismo y la hostelería.

El apoyo al campo es fundamental y, en ese sentido, Casado pidió acabar con su estigmatización por «contaminante y esclavista» y advirtió también de que la reforma de la Política Agraria Comunitaria está poniendo sobre la mesa «5.000 millones de euros menos para el campo español», lo cual no se debe permitir.

Plan nacional del agua

Un plan nacional del agua es otro de los puntos de su decálogo, y eso engloba la construcción en las cuencas cedentes de las infraestructuras que sean necesarias. Hay que potenciar las actividades vinculadas al entorno rural como el turismo, la caza, la pesca, el deporte y el ocio, dijo Casado, para quien otra medida imprescindible es extender la digitalización de alta capacidad.

Así, propuso la sostenibilidad medioambiental «sin la exclusividad de medidas punitivas» y, en este punto, reclamó no demonizar al sector primario que genera el 12% del PIB y contribuye a la Marca España; además, se preguntó hasta qué punto contamina más un filete que otro alimento traído en contenedores en largas travesías.

Contra la despoblación propuso una regulación fiscal y burocrática que no entorpezca el comercio de la industria agroalimentaria, así como extender la tarifa plana a los autónomos del medio rural hasta los 24 meses o tres años para las mujeres, jóvenes y parados de larga duración. El Partido Popular, continuó Pablo Casado, plantea una nueva ley de suelo que elimine trabas burocráticas y urbanísticas en las zonas afectadas por despoblación.

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