Una segunda marea negra se encuentra a 30 kilómetros de Finisterre y el «Prestige» sigue vertiendo fuel
«Galicia debe prepararse para lo peor»
La situación en Galicia puede emperorar este fin de semana si el viento no cambia de rumbo; algo que en principio no se espera. La segunda ma
Además el conselleiro de Pesca de la Xunta informó de que las aeronaves que sobrevuelan la zona han detectado en el punto el que se hundió el Prestige la presencia de nuevas manchas, por lo que dedujo que «es probable que siga vertiendo fuel». El conselleiro agregó que, además de la mancha principal, se han detectado otras dos, de menor tamaño que la anterior, a entre veinte y treinta millas de la isla de Sálvora. La única esperanza de que la Costa de la Muerte se libre de un segundo desastre ecológico está puesta en el comportamiento de las corrientes, que podrían empujar la mancha hacia el norte. De momento la previsión del viento es del oeste o noroeste y está empujando el vertido en dirección a la costa. De momento está a 30 kilómetros de tierra. El conselleiro de Pesca de la Xunta de Galicia, Enrique López Veiga, adelantó que este fin de semana y la semana que viene van a ser complicados para la costa gallega y apuntó que hay que esperar «algo peor» que lo que ocurrió con la primera. Tras el Consejo de Ministros, el vicepresidente primero del Gobierno y ministro portavoz, Mariano Rajoy, no avanzó datos sobre la magnitud de la mancha, ya que «va cambiando con la marea». Sin embargo, adelantó que se espera que afecte a las mismas áreas perjudicadas por la primera marea negra, un dato que, de resultar así, agravará aún más la situación en la Costa de la Muerte, pero que dejaría sin contaminar las Rías Baixas. Proteger la ría de Arousa López Veiga mostró su confianza en que la mancha no llegue a las Rías Baixas, donde ya se ha desplegado un dispositivo que incluye un barco que puede absorber fuel que vigila la entrada de la Ría de Arousa, la más rica de Galicia. En la costa gallega se han desplegado un total de 25.000 metros de barreras. En el lugar se encuentran siete barcos con el objetivo de recoger el fuel que permitan las condiciones meteorológicas, según explicó Rajoy. Se trata del Aycon y Ailette franceses, el Arca y Rinjdelta holandeses, el Neuwerk alemán el Sefton Supporter inglés y el Union Beaver belga. Hasta el momento han recogido unas 2.314 toneladas del mar y otras 2.000 de tierra. El ministro portavoz explicó que en las playas están trabajando 777 personas con una importante colaboración internacional.