Los marineros de las Rías Bajas se preparan ante la amenaza del fue del vertido del «Prestige»
Vigo limpia la tercera marea negra que anoche estaba a tres millas de Llanes
Los marineros de Bayona y de la ría de Vigo recogieron cerca de 40 toneladas de fuel de manchas situadas a unas tres millas de la localidad de Santa M
El mal tiempo dificulta las labores de limpieza del vertido de fuel del «Prestige»
El ministro de Fomento, Álvarez-Cascos advirtió ayer en La Coruña de que la mancha de fuel procedente del Prestige que se encuentra más cercana a la costa está a tres millas al nordeste de Llanes (Asturias), mide dos millas por diez metros y es «de color marrón espesa». No obstante, el ministro matizó más tarde en Bilbao que con el despliegue de aviones y helicópteros que rastrean la costa cantábrica se puede garantizar una respuesta inmediata a las manchas que requieran la actuación de los barcos recogedores de fuel, e indicó que «no hay ninguna amenaza urgente» en el Cantábrico. Citó además como la mayor condensación de manchas fragmentadas la situada a 28 millas al sudoeste de Cabo Silleiro, en un área rectangular de 18 millas por seis de ancho. Desde primeras horas de la mañana, los Rías Bajas se prepararon por si tuviesen que volver a defender sus barcos marisqueros y caladeros, mientras varias embarcaciones salieron para vigilar la posible entrada de nuevos vertidos. Además, los miles de voluntarios que este fin de semana han vuelto a faenar en las playas gallegas han continuado «contra viento y marea» sus labores, según explicó el responsable de protección civil de Muxía, una de las localidades más afectadas. Sergio Villamor, un voluntario que trabajó en la playa de La Muralla, muy cerca del puerto de Aguiño, explicó las dificultades de retirar el fuel de las rocas de esta zona, ya que está muy pegado y ni las paletas sirven para arrancarlo. Algunos colectivos o instituciones, como el Ayuntamiento de Pontevedra o un grupo de voluntarios de Cartagena han censurado la actitud de la empresa Tragsa, encargada de las tareas de limpieza, por entender que impide la colaboración de los trabajadores altruistas. Sin embargo, un portavoz de esta empresa aseguró a Efe que se limita a coordinar a los voluntarios registrados por la administración, si bien tratan de atender a los que acuden a Galicia por su cuenta. Sobre la coordinación de voluntarios se llegó ayer a un acuerdo entre los ministros de Trabajo y Medio Ambiente, Eduardo Zaplana y Jaume Matas, y representantes de varias ONG, para crear una unidad de coordinación de las personas que acudan a limpiar las zonas afectadas, que comenzará a funcionar hoy. El patrón mayor de la Cofradía de O Grove y vicepresidente de la Federación de Pontevedra, Francisco Iglesias, afirmó que «sobra» gente pero «faltan medios materiales» para combatir el hidrocarburo del mar.