Rabat autoriza a 64 barcos españoles a pescar en sus aguas desde el día 15

Tras una reunión de cuatro horas en Rabat entre los ministros de pesca de España y Marruecos se han establecido las modalidades y las condiciones técnicas para poner en práctica el ofrecimiento realizado el pasado día 13 por el rey Mohamed VI de abrir excepcionalmente los caladeros marroquíes a los pesqueros españoles afectados por la marea negra del Prestige. Los pescadores españoles podrán descargar en el puerto que quieran y Marruecos tampoco solicitará ningún tipo de compensación económica, ni exigirá el pago de las correspondientes licencias. Las 64 embarcaciones que podrán faenar en aguas marroquíes se dividen en 15 barcos artesanales, 25 cerqueros, 20 palangreros y cuatro arrastreros, estos últimos dedicados exclusivamente a la pesca de la merluza negra, añadió el ministro español. Además, los pesqueros españoles no serán sometidos a medidas de control por parte de Marruecos ni estarán obligados a embarcar en sus tripulaciones a pescadores marroquíes. Los barcos podrán faenar en los caladeros de la costa atlántica de Marruecos durante tres meses, periodo que se podrá prorrogar en función de la evolución de la situación en las tres comunidades españolas afectadas. Control español En una conferencia conjunta al término de la reunión el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Miguel Arias Cañete expresó el «profundo agradecimiento del Gobierno y del pueblo español al gesto de solidaridad y de humanidad del rey Mohamed VI». El ministro destacó también las facilidades que habían dado las autoridades marroquíes para poner en práctica el ofrecimiento del monarca. «No estamos ante un nuevo acuerdo pesquero, sino ante una oferta muy generosa que nos permite dar respuesta a una situación muy difícil para los pescadores de las comunidades españolas afectadas por la marea negra», dijo. Cañete señaló que, si bien las autoridades marroquíes no controlarán a los pesqueros que vayan a sus caladeros, «el Gobierno español sí que tomará algunas medidas de control». A la reunión también asistió el ministro delegado marroquí de Asuntos Exteriores, Taieb Fassi Fihri, quien afirmó que el ofrecimiento de Mohamed VI no tiene ninguna relación orgánica, táctica o interesada con el diálogo que felizmente se ha reanudado con España. «Si este gesto hace que la atmósfera mejore y la confianza entre los dos países se restablezca, tanto mejor, pero no responde a cálculos interesados», reiteró. Pero desde España se pide moderación. La ministra de Asuntos Exteriores, Ana Palacio, afirmó que no hay que forzar el retorno de los embajadores español y marroquí a su respectivos puestos después del gesto marroquí en favor de la flota gallega. La jefa de la diplomacia española agradeció el gesto que tuvo el rey de Marruecos, Mohamed VI, con los pescadores gallegos y que, a su juicio, le honra por el valor «simbólico».