El investigador del caso Villarejo busca blindar las pruebas para evitar su nulidad
El inspector jefe Gonzalo Fraga, responsable de la unidad de Asuntos Internos que investiga a José Manuel Villarejo, compareció ayer en el primer juicio de la operación Tándem en la Audiencia Nacional. Su presencia como testigo era esperad ya que fue quien dirigió los registros en 2017 de las propiedades y oficinas del comisario y de su socio, Rafael Redondo.
Fraga se hizo con los documentos y las cintas que fueron nutriendo las sucesivas piezas separadas de la macrocausa, tantas como proyectos parapoliciales llevó a cabo la empresa Cenyt. Un cometido que fue utilizado por Villarejo para alentar ante la Sala la tesis de la vulneración de la cadena de custodia de este material y la manipulación de las grabaciones que él mismo realizó.
El testigo se afanó ayer en eliminar las sospechas que ha divulgado Villarejo, cuya defensa busca la nulidad de los registros, lo que dejaría la macrocausa sin parte del sustrato probatorio.