Diario de León

Los barones del PP asumen que la transición de Casado a Feijóo será tranquila

Sólo Ayuso ha alterado la jornada exigiendo que se expulse a todos los implicados en la trama de espionaje

Feijóo, en primer plano, junto al resto de barones populares, hoy. JAVIER LIZÓN

Feijóo, en primer plano, junto al resto de barones populares, hoy. JAVIER LIZÓN

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Los barones del PP asumen que la transición que el partido inicia con la convocatoria hoy del XX Congreso Nacional para relevar a Pablo Casado culminará, sin nuevos sobresaltos, en la elección de Alberto Núñez Feijóo como su nuevo líder, a pesar de que el presidente de la Xunta aún no ha hecho oficial su candidatura.

Con el hotel Eurostars Tower de Madrid como escenario y entre una fuerte expectación mediática, los presidentes autonómicos de la formación han expresado con distintas fórmulas un mensaje de unidad con el que pretenden dejar atrás el trauma provocado por el choque entre la todavía dirección nacional del partido y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, que este martes intervendrá en la Junta.

Los barones esperaban de Casado un discurso de altura y en sus palabras ante los 400 miembros de la Junta Directiva, el todavía presidente del PP, que dejará de serlo en el congreso de abril, ha dicho que lamenta lo que haya hecho "mal" pero que tiene la conciencia "muy tranquila, llena de agradecimientos, sin rencor ni frustración".

El discurso de Casado ha sido finalmente en abierto, a pesar de que ayer se informó de que sería a puerta cerrada, según el todavía vicesecretario de Comunicación del PP, Pablo Montesinos, por decisión del comité organizador del congreso y de la nueva coordinadora general, Cuca Gamarra. Tras Casado tomarán la palabra, ya a puerta cerrada, presidentes como Díaz Ayuso y voces críticas como Álvarez de Toledo.

Antes de escuchar a Casado, los barones del PP habían perdido ya responsabilidad y arrimar el hombro a todos los dirigentes de peso, incluida Díaz Ayuso.

Uno de los presidentes que ha hablado a su llegada al hotel madrileño ha sido el de Andalucía, Juanma Moreno, que ha dicho estar "muy esperanzado" en que el PP supere una “gravísima crisis”, para lo que "hace falta generosidad, por parte de todos, mucha serenidad, sensatez y sentido común”.

"Serenidad y tranquilidad", ha reclamado también el presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, que, como también ha señalado Jorge Azcón, de Aragón, ha alabado a Feijóo como referente y la única alternativa que tiene el PP para su proyecto futuro. Carlos Iturgaiz, de País Vasco, ha destacado el apoyo "abrumador" que tiene.

"La solución al PP y a España es Alberto Núñez Feijóo", ha dicho también Fernando López Miras, presidente de la Región de Murcia.

Ninguno de los cargos que han hablado en público y tampoco los que lo han hecho en privado, esperan que tensión ni en la Junta ni en el Congreso. "No estamos por aquí para ajustar ninguna cuenta estamos para ajustar y engrasar el partido como organización", ha dicho el presidente del PP en Extremadura, José Antonio Monago. Paco Núñez, de Castilla-La Mancha, augura también diálogo.

Todos quieren mirar ya al futuro. Incluso Álvarez de Toledo ha evitado criticar a Casado y ha señalado a los medios que "el proyecto político es la clave", la "definición ideológica", por encima de las personas que ejerzan el nuevo liderazgo y aunque este martes no ha hecho alusiones al sucesor, días atrás ha comparado la llegada de Feijóo con la entrada de un adulto en la habitación.

Además, se despejan los rumores sobre una candidatura alternativa impulsada por el ex secretario general de Teodoro García Egea. Lo niegan en su entorno y lo descartan también sus adversarios.

A partir de mañana, comienza el plazo para presentar candidaturas y será en este plazo cuando Feijóo anuncie si da el paso. No se puede descartar que haya más de una lista -solo hacen falta cien avales pero en el seno del PP no esperan ninguna de peso, una vez que Díaz Ayuso se desmarcó del proceso.

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