La Policía investiga una violación y cuatro sumisiones químicas en los Sanfermines
La Polícia Foral de Navarra investiga una agresión sexual ocurrida en la madrugada del sábado al domingo, en las inmediaciones del barrio pamplonés de Mendillorri, en el epicentro de los Sanfermines. La denuncia no trascendió hasta ayer.
El Ayuntamiento de Pamplona declaró su «total rechazo y condena» ante este suceso y en una declaración oficial mostró el apoyo y solidaridad con la víctima y su entorno, al tiempo que pidió máximo respeto para preservar sus derechos e intimidad.
En cumplimiento de su protocolo de coordinación y respuesta, el consistorio de la capital navarra se reafirmó en su rechazo y condena a cualquier tipo de agresión, violencia o actitud sexista que se produzca en la ciudad y su compromiso en trabajar para eliminar las agresiones sexistas, mejorar la seguridad y garantizar el pleno ejercicio de la libertad de las mujeres en todo tipo de entornos.
El consistorio mantiene una política de tolerancia cero contra todo tipo de ataques a la libertad sexual desde la brutal violación de La Manada, en 2016, que supuso una conmoción en la ciudad.
A la violación que se investiga ahora se sumaron ayer dos nuevas denuncias por tocamientos, que se unen a las cuatro atestados de mujeres ante la Policía Foral por posible intento de sumisión química, ya que «sintieron pinchazos» en su cuerpo mientras estaban en la fiesta.
Todas han declarado que se sitieron mareadas, con sensación de pérdida de conocimiento y de la realidad. Las denuncias se están investigando junto a la de la violación denunciada.
El alcalde de Pamplona, Enrique Maya, expresó su preocupación por estas cuatro denuncias. Aseguró que «vamos a estar muy atentos», pero explicó que, a fecha de hoy, no hay detenciones. Maya señaló que es un asunto que «preocupa» y destacó que, «afortunadamente, según me han informado, no tuvo otro efecto que el propio pinchazo».
«Estas chicas notaron que algo les ocurría pero, afortunadamente, porque iban en cuadrilla y pueden comentarlo, no pasó más», concluyó.
Hay máxima vigilancia policial en los Sanfermines para evitar violencia sexual.