Díaz Ayuso tilda a Pedro Sánchez de «hombre blandengue» frente a Feijóo

El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, sus ‘barones’ territoriales y su comité de dirección exhibió ayer un PP «unido para ganar» en la XXV Interparlamentaria que el partido celebra este fin semana en Toledo. Lo hizo wen medio de lo que él interpreta como la «división interna» del Ejecutivo de Pedro Sánchez y el pulso de Macarena Olona al presidente de Vox, Santiago Abascal.

Génova convirtió el cónclave en el pistoletazo de salida de la larga precampaña electoral que se avecina en los próximos meses. Su objetivo es «teñir de azul España» y reconquistar nuevas plazas, un reto para que el reclaman un partido «unido» y «preparado».

De hecho, esas fueron dos de las principales palabras —junto al «fin del sanchismo»— que más se han repetido en la primera jornada de la Interparlamentaria del PP. «Ante la política de la división, vamos a demostrar que somos un partido más unido, cohesionado y preparado para gobernar que el Gobierno que tiene», proclamó en su discurso la secretaria general del PP, Cuca Gamarra.

Después subieron a la tribuna los distintos presidentes del PP, que arengaron a los cargos y militantes para ganar en sus respectivas plazas. Uno de los más optimistas fue el andaluz Juanma Moreno, quien ha resaltado que «se puede» cambiar los gobiernos socialistas «por mucho tiempo y anclaje que tengan».

La madrileña Isabel Díaz Ayuso contrapuso la «alegría, la apertura y la luz» del PP al «autoritarismo» de Pedro Sánchez, al que llegó a retratar como el auténtico «hombre blandengue» (recurriendo a la campaña del Ministerio de Igualdad) porque no es capaz de «llenar de ilusión absolutamente nada en política», a pesar de que tiene «bajo su cuerda todas las instituciones» y «la propaganda».

Apenas seis meses después de la profunda crisis interna que afectó al PP y terminó con el liderazgo de Pablo Casado, los populares han buscado ayer visualizar públicamente unidad y músculo interno con la vista puesta en los próximos comicios.

En los pasillos de la Interparlamentaria, algunos dirigentes se refirieron en privado a la amenaza de escisión interna que sufre Vox con Macarena Olona, quien el viernes dijo que pedirá verse con Abascal para ver si comparten proyecto. «Deseamos que se estabilice cuanto antes», comentaron con ironía fuentes de la cúpula del PP, que recordaron que ahora el presidente de Vox sufre en sus carnes lo que él mismo hizo al PP.

Golpe de efecto en Toledo

En plena polémica por el supuesto distanciamiento de los populares españoles de la presidenta de la Comisión Europea, la también conservadora, Ursula Von der Leyen, a cuenta de los gravámenes a las energéticas, la política alemana intervino online este sábado en el cónclave de los populares españoles para dar un espaldarazo sin matices a Alberto Núñez Feijóo.

Sólo horas después de que el PSOE sacara pecho de la relación privilegiada de Pedro Sánchez con Von der Leyen y denunciara la supuesta soledad europea del PP, los populares contaron con un vídeo de la veterana política popular en el que calificaba a Feijóo como un dirigente «experimentado» y «previsor». Ante más de 600 cargos del partido, Von der Leyen aprovechó su breve discurso para pedir nuevas formas de «aliviar la carga sobre los hombros de las empresas» ante el «difícil» momento económico.

La presidenta europea, que mantiene una excelente relación personal con Pedro Sánchez, tras el guiño a Feijóo, no quiso ir más allá, para no entrar en polémicas nacionales, probablemente sabedora de que el Gobierno afea a la oposición situarse en contra de los dictámenes de Bruselas. Una posición que el PP ya ha matizado. La intervención sorpresa de Von der Leyen fue, sin duda, lo más destacado la primera sesión de este gran cónclave popular toledano con el que el PP empieza a calentar motores para un curso clave, con un 2023 con elecciones municipales y generales.